En medio del clima político actual, los intendentes del Partido Provincia (PRO) expresan su malestar por las exigencias del Frente de Todos. Una fuerte escalada en tensiones que generan un ambiente incómodo dentro del espacio político.
Hoy martes 19 de julio de 2025, el clima político se vuelve más complejo con la fuga de intendentes del PRO que se expresan furiosos por las condiciones impuestas. Según informaciones recogidas en los últimos días, varios representantes locales estarían evaluando seriamente abandonar el partido debido a posturas que consideran excesivas y restrictivas.
La situación parece ser el resultado de una combinación delicada entre la postura del poderoso bloque LLA (Línea Larga) y las recientes presiones ejercidas por el referente nacional Diego Milei. Este último viene generando cierta inquietud en los círculos locales, especialmente cuando se trata de definir las listas para las próximas elecciones.
En una reacción rápida, varios intendentes han manifestado su insatisfacción a través de canales internos y públicos. La fuerte escalada del conflicto ha generado un ambiente de profundo malestar dentro del PRO local, con algunos incluso especulando en dejar el espacio político por completo.
Sin embargo, no todo está perdido. El intendente de Vicente López y Santilli, a través de una comunicación reciente verificado este martes 19 de julio, ha logrado mediar entre facciones enfrentadas. Este mediador clave se ha destacado precisamente en esos momentos donde otros parecen divididos.
La estrategia que está llevando adelante el oficialismo es conocida como ‘un tapado’ para no mencionar las reales implicaciones políticas, y la supervisión de Karina Milei – esposa del diputante nacional – ha sido otro elemento complicador. Parece un juego de fuerzas en conflicto que podría tener grandes consecuencias a mediados del año.
En medio de todo este revuelo político, vale destacar el discurso humanista y profesional del sector PRO más moderado. Un ejemplo claro es lo expresado por Diego Reyes – vocero reconocido – asegurando: “Son más importantes las personas y la gestión que un sello partidario”. Este tono conciliador podría ser clave para estabilizar el conflicto.
La fuga de intendentes no es nuevo en la política argentina, pero esta combinación específica entre los bloques LLA del PRO y las presiones de Milei representa una situación única que podría tener eco en otras ciudades importantes. El caso Vicente López y Santilli es un microcosmos perfecto de lo que está pasando a nivel nacional.
Los datos recabados hasta el momento indican que la cantidad crítica involucrada son al menos 15 intendentes, aunque fuentes internas sugieren que podría ser superior. La mayoría pertenecen a distritos considerados tradicionalmente bastiones del PRO en Buenos Aires.
La clave ahora está en entender si esta crisis es pasajera o si marca un antes y después en las relaciones dentro de la estructura política local. La capacidad mediadora del intendente Santilli será fundamental para determinar el futuro inmediato del espacio político.