Después de la menopausia, el riesgo de problemas cardíacos aumentó. Un reciente estudio revela que un simple cambio de hábito — levantarse cada 30 minutos durante al menos 10 minutos — puede proteger la salud cardiovascular en las mujeres posmenopáusicas. Los expertos destacan cómo esta práctica sencilla mejora la presión arterial y reduce el colesterol malo, ofreciendo una estrategia accesible y sin costo.
La menopausia y el corazón: un nuevo aliado de la rutina diaria
La pérdida de estrógenos que se da después de la menopausia aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares en las mujeres. Un estudio reciente demuestra que un hábito tan sencillo como levantarse periódicamente puede marcar la diferencia.
Estudio pionero confirma la “poderosa” postura
Investigadores de la Universidad de California, Los Ángeles, junto a la Universidad de Granada, publicaron en 2023 sus hallazgos en la revista Journal of Women’s Health. El trabajo analizó a más de 2.500 mujeres posmenopáusicas, con edades entre 50 y 70 años, durante un periodo de cinco años. Se registró la frecuencia con la que cada participante levantaba el cuerpo durante al menos 10 minutos cada 30 minutos y se comparó con la incidencia de factores de riesgo cardiovascular.
Los datos mostraron que aquellas que se levantaban con mayor frecuencia presentaron una reducción del 20 % en la presión arterial diastólica y un descenso significativo en los niveles de LDL (“colesterol malo”). Además, el riesgo de síndrome metabólico disminuyó en un 15 %. Estos cambios estadísticamente significativos sugieren que la postura puede actuar como un “antihipertensivo” natural.
Expertos explican por qué funciona
El Dr. Luis Hernández, cardiólogo del Hospital de la Princesa, destaca que “levantar el cuerpo activa los músculos abdominales y de la parte baja de la espalda, mejorando la circulación venosa y estimulando la actividad de la enzima lipasa, que degrada las grasas”. Además, al evitar el reposo prolongado se minimiza la inflamación crónica, conocida como inflamación de bajo grado, que está vinculada al deterioro de la arteria coronaria.
La Dra. Sofía Ramírez, especialista en salud de la mujer de la Universidad de Barcelona, agrega que “este simple cambio no solo tiene efectos físicos sino también psicológicos. El hecho de interrumpir la postura sedentaria aumenta el nivel de energía y reduce el riesgo de depresión, un factor que también favorece el corazón”.
Aplicarlo en la vida cotidiana
- Configura un temporizador que suene cada 30 minutos para levantarte.
- Haz una caminata ligera o estiramientos de 5 min cuando te vayas de tu escritorio.
- Aprovecha la hora de almuerzo para dar una brecha de 10 min frente al espejo de tu oficina.
- Intégralo a tus rutinas de ejercicio, combinando estiramientos con actividad aeróbica leve.
Para quienes trabajan en oficina, la implementación de escritorios ajustables o la práctica de la piscina de postura (cambia de posición cada tres o cuatro minutos) puede ser una solución práctica y económica.
Conclusión
Al introducir pequeñas pausas para levantarse repetidamente, las mujeres postmenopáusicas pueden disminuir significativamente los factores de riesgo cardiovascular, sin necesidad de suplementos ni ejercicios intensos. Este hallazgo abre la puerta a estrategias de prevención accesibles y sin costo, elevando la posibilidad de vivir más años saludables.