El gobierno bajo la dirección de Javier Milei ha anunciado que está estudiando un ‘Plan Canje’, una iniciativa que permitiría a los consumidores cambiar sus vehículos usados por automóviles nuevos con incentivos fiscales, con la finalidad de reactivar la industria automotriz y acelerar la venta de autos 0 kilómetros. La propuesta, aún en fase de análisis, busca dinamizar el mercado interno y fortalecer la producción local.
El Gobierno argentino, a cargo del presidente Javier Milei, ha iniciado un estudio sobre el “Plan Canje” para estimular la venta de automóviles nuevos. La iniciativa consiste en que los consumidores tengan la posibilidad de intercambiar su vehículo usado por un vehículo nuevo, recibiendo incentivos fiscales y facilidades de crédito para dar a conocer la propuesta.
El sector automotriz ha sido históricamente un baluarte de la economía argentina y este nuevo plan se enmarca dentro de la estrategia de Milei de revitalizar la industria local. Si la medida se aprueba, se espera que el mercado de autos 0 km crezca en un escenario donde la producción de automóviles en el país ronda los 70.000 unidades anuales.
El Plan Canje, aunque aún en fase de análisis, contempla la posibilidad de eximir parcial o totalmente el Impuesto al Automotor y al IVA para el vehículo nuevo cuando se entregue el usado a cambio. Además de la exención, se ha planteado incluir un monto fijo adicional que podría servir como pago de servicios de registro y transporte, aunque los detalles exactos se encuentran todavía en discusión con los organismos pertinentes.
El beneficio también se extiende al mercado de autos usados, pues el intercambio de los vehículos antiguos por nuevos impulsaría la movilidad de la flota y podría traer mejoras ambientales al reducir la circulación de auto más antiguos. Los gremios de fabricantes y distribuidoras de automóviles, incluidos representantes de GM, Ford y Mitsubishi, han manifestado su interés en la propuesta y solicitan que el proyecto incluya lineamientos claros sobre la selección de los vehículos de sustitución, con prioridad a los modelos nacionales.
El Ministerio de Industria, Comercio e Innovación (MICIN) y la Dirección Nacional de Inversiones Publicas (DIN) seguirán trabajando en la definición de los parámetros y en un cronograma de adopción. El Gobierno anuncia que el esquema será evaluado en un plazo de tres a seis meses, con la intención de someter una propuesta definitiva al Congreso al final del año. Los ciudadanos y los consumidores estarán atentos a la evolución de este plan que puede marcar un nuevo rumbo para el mercado automotriz argentino.