Activistas de Alaska han bloqueado carreteras y reunido miles de voces en contra de la próxima cumbre bilateral entre los Estados Unidos y Rusia, programada para el 6 de julio de 2025 en Fairbanks. La protesta, liderada por organizaciones indígenas y grupos ambientalistas, exige que las negociaciones se reevalúen ante la crisis climática y la defensa de los derechos de los pueblos originarios. Los organizadores advierten de una posible extensión de las movilizaciones si las autoridades no reorientan el diálogo.
Protestas masivas en Alaska
Miles de manifestantes, entre activistas indígenas, ecologistas y ciudadanos preocupados, han ocupado la carretera I-49 y la plaza central de Fairbanks. El bloqueo se inició el 3 de junio y sigue activo. Los que reclaman una revisión de la cumbre exigen un compromiso concreto con la protección de los ecosistemas locales y la garantía de participación plena de las comunidades nativas.
La cumbre planificada entre Trump y Putin
Se confirma que el 6 de julio de 2025 se llevará a cabo la reunión bilateral entre el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, y el presidente de Rusia, Vladimir Putin, en el centro de conferencias de Fairbanks. El objetivo, según los comunicados oficiales, es negociar la paz energética y la cooperación en materia de seguridad, pero la falta de compromiso con temas medioambientales ha generado indignación.
Contexto histórico de Alaska
Alaska fue adquirida por los Estados Unidos de la Federación Rusa en 1867 por siete millones doscientos mil dólares en el famoso Tratado de Compra de Alaska. Este traslado marcó el fin de la presencia rusa en la región y configuró a Alaska como el estado número 49 de la federación.
Implicaciones internacionales
La potencial cumbre promete repercutir en las relaciones bilaterales entre EE UU y Rusia. Si las negociaciones avanzan, se espera una reducción de las tensiones en el norte del Atlántico y una nueva etapa de cooperación. Sin embargo, el clima político y las protestas internas sugieren la necesidad de un marco más inclusivo y sostenible.
Reacción de las autoridades
El gobernador de Alaska, Mike Dunleavy, declaró que las autoridades garantizan la seguridad y están de acuerdo con la realización de la cumbre, pero también resaltó la importancia de escuchar las demandas de los pueblos originarios. Por su parte, la oficina de la Casa Blanca ha ofrecido reuniones adicionales con los líderes de la protesta para asegurar que las preocupaciones se integren en los planes de la cumbre.