El rover Perseverance de la NASA ha descubierto el 18 de agosto un extraño objeto con forma de casco de unos 3 metros en el cráter Jezero de Marte, capturado por su cámara Mastcam‑X. El hallazgo, inesperado en la superficie rojiza del planeta, vuelve a encender la especulación sobre posibles formas de vida extraterrestre y su origen.
Bajo la luz del Sol marciano, el rover Perseverance capturó el 18 August 2025 una figura que recuerda a un casco de unos 3 metros de altura, situada en el cráter Jezero. La imagen emergió de la cámara Mastcam‑X, ofreciendo una vista jamás antes documentada del suelo rojizo.
La presencia de una estructura tan articulada y de semejante complejidad ha reavivado la discusión entre científicos y astrónomos sobre la posibilidad de que Marte haya ostentado vida o que artefactos de origen desconocido hayan llegado a su superficie.
El hallazgo se suma a los recientes descubrimientos que han impulsado la comunidad espacial. En agosto del mismo año, la NASA detectó fragmentos pre-solares de más de 4.6 Ga en muestras traídas del asteroide Bennu, lo que indica la presencia de materiales que datan del nacimiento del Sistema Solar.
En el mismo período, el telescopio James Webb anunció el descubrimiento de la 17ª luna de Urano, con la designación provisional S/2025 U 1; orbitando a unos 61 000 km y midiendo aproximadamente 1.2 km de diámetro, lo que lo convierte en el satélite más pequeño del imperio uraniano.
El 1 Sep 2025 la NASA reveló un estudio clínico sobre la pérdida de densidad ósea en astronautas, donde la práctica de saltos de un minuto diarios mostró un 35 % de reducción del dolor de rodilla y una mejora del 25 % en la movilidad a las 12 semanas, recomendándose incluso como terapia para pacientes postoperatorios y seniors.
El programa Dawn concluyó su misión en 2018 tras visitar Ceres, el planeta enano de 940 km de diámetro y una masa de 9.43×10²⁰ kg; descubrimientos revelaron hielo y brines salinos bajo su superficie, y la existencia de un océano potencial con temperaturas entre 130 K y 167 K, alimentado por la desintegración radiactiva de U, Th y K.