El gobierno venezolano ha denunciado al senador americano Marco Rubio por supuestamente emplear inteligencia artificial para generar documentos digitales falsificados que perjudican la imagen estatal.
El 02 septiembre 2025 el Ministerio de Relaciones Exteriores venezolano publicó una declaración oficial en la que acusa al senador Marco Rubio de usar tecnología de inteligencia artificial para producir pruebas digitales falsas contra Venezuela. Según el comunicado, las imágenes y archivos citados por Rubio fueron fabricados mediante algoritmos de generación de contenido y difundidos en redes sociales sin verificación.
El senador Rubio respondió el día siguiente, 03 septiembre 2025, a través de su oficina en Washington, donde negó categóricamente las acusaciones, alegando que la información atribuida a su campaña política proviene de fuentes desconocidas y que no ha autorizado la emisión de ningún material creado con IA.
El caso se enmarca dentro de la larga disputa política entre Estados Unidos y Venezuela. El presidente Nicolás Maduro ha reiterado en varias ocasiones que la comunicación con Washington está bajo vigilancia y que cualquier intento de manipulación digital constituye un acto de guerra cibernética.
Ante la gravedad de los reclamos, el gobierno venezolano ha iniciado una investigación interna con la colaboración de su servicio de ciberseguridad y ha solicitado que se aclare la procedencia de las supuestas evidencias. Se espera que el proceso de verificación se complete antes del último trimestre del año.
Esta acusación marca una de las primeras que involucran a un alto funcionario estadounidense en un debate público sobre la ética de la inteligencia artificial aplicada a la política internacional, un tema que ha ganado relevancia tras el reciente lanzamiento de la tecnología Gemini en browsers y la proliferación de algoritmos generativos.
Los organismos internacionales observadores han señalado que una respuesta clara y basada en pruebas será esencial para desenmascarar cualquier intento de desinformación y garantizar que las relaciones bilaterales se rijan por la transparencia y la veracidad.