En agosto 2025, una docente de la provincia de Mendoza fue detenida bajo la sospecha de poseer material de abuso infantil. La investigación reveló que el contenido pertenecía a una divertida toma de su nieta bailando, eliminando todas las sospechas. La policía confiscó el teléfono móvil y el juez ordenó su liberación al instante. La fiscalía ya archivó las denuncias y se espera un sobreseimiento definitivo. Este caso subraya la importancia de la verificación judicial y la transparencia.
En la última semana de agosto de 2025, la docente que trabaja en una escuela de la provincia de Mendoza fue detenida cuando un dispositivo móvil fue confiscado por autoridades de seguridad. El aparato contenía una serie de videos que, después de una revisión exhaustiva, demostraron ser tomas divertidas de la nieta de la educadora bailando frente a su casa. No se halló material de abuso infantil ni indicios de conducta ilícita.
La policía explicó que la alerta inicial se produjo tras una alerta de la Fiscalía de la Ciudad de Mendoza, que se basó en la percepción de que algunos clips presentaban contenido inapropiado. Al llegar el dispositivo a la sede de la fiscalía, un equipo de especialistas en informática forense analizó cada archivo. Los resultados confirmaron que los videos eran de carácter familiar y que la docente apenas tenía acceso a ellos, ya que pertenecían a su nieta, quien las había grabado con su propio celular para compartirlas en redes sociales.
Con base en esta evidencia, el juez de turno ordenó la liberación inmediata de la docente y la devolución de sus pertenencias. Además, la fiscalía abrió un proceso de sobreseimiento, solicitando la cancelación de los cargos. El tribunal aceptó la petición y el expediente quedó archivado, marcando el fin de una acusación infundada que podría haber dejado una marca indeleble en la comunidad educativa.
Este incidente refuerza la necesidad de fortalecer los protocolos de verificación de evidencias digitales y de capacitación continua en el manejo de dispositivos electrónicos tanto para funcionarios de la justicia como para docentes. La docente, quien trabaja desde hace más de quince años, ha expresado que la injusticia la dejó conmocionada, pero que la respuesta rápida de la policía le dio la oportunidad de aclarar la situación antes de que la verdad se perdiera en la incertidumbre.
La comunidad escolar, por su parte, se mostró apoyada y agradecida ante la transparencia del proceso. Las directivas de la provincia han anunciado la intención de implementar charlas y talleres sobre seguridad digital en el próximo cuatrimestre, con el objetivo de evitar futuros malentendidos y proteger tanto a los estudiantes como a los educadores.