El pasado 6 de septiembre de 2025, se anunció la muerte de Rosa Rosinblit, cofundadora y presidenta honoraria de Abuelas de Plaza de Mayo. A los 106 años, la activista argentina dejó una huella imborrable en la lucha por los derechos de los niños desaparecidos durante la dictadura militar.
Una carrera dedicada a la justicia
Rosa Rosinblit nació el 24 de marzo de 1919 en Buenos Aires y desde joven se involucró en movimientos sociales que defendían los derechos de los más vulnerables. Durante la dictadura militar (1976‑1983) perdió la vista y fue detenida, lo que la motivó a profundizar su compromiso con la verdad y la memoria histórica.
Co‑fundadora de Abuelas de Plaza de Mayo
En 1977, junto a otras diez Abuelas, creó la organización que hoy lleva el nombre de Abuelas de Plaza de Mayo. La institución se centraría en localizar a los niños que fueron adoptados ilegalmente por familias vinculadas al régimen. Gracias a su incansable labor, se logró identificar y devolver a más de 600 niños a sus familias biológicas.
Presidente honoraria y símbolo de la lucha
Tras retirarse de la presidencia activa, Rosa continuó como presidenta honoraria, símbolo de resistencia y de la lucha continua por los derechos humanos. Su presencia en eventos y conferencias inspiraba a nuevas generaciones de defensores de la justicia.
Su legado
La muerte de Rosa el 6 de septiembre de 2025 deja un legado de valentía y compromiso. Su vida demuestra que la solidaridad y la determinación pueden lograr cambios profundos en la memoria colectiva y el Estado de derecho.