El presidente Donald Trump aseguró el 19 de agosto de 2025 que Estados Unidos lanzó nuevamente las armas navales contra una embarcación venezolana, marcando la tercera incautación en el mar Caribe. El ataque, ejecutado por tres destructores y un grupo anfibio, resultó en la desaparición de la embarcación y la pérdida de 11 tripulantes. El evento destaca la intensificación de la campaña antinarcóticos del gobierno de Washington, que también ha movilizado a 4.5 millones de milicianos en respuesta.
El 19 de agosto de 2025 Estados Unidos desplegó tres destructores y un grupo anfibio frente a la costa venezolana. A través de una operación de alto impacto la tripulación naval neutralizó al menos dos embarcaciones de contrabando, de las cuales la tercera quedó completamente destruidas. Un total de once tripulantes perdió la vida durante el derribo.
El presidente Nicolás Maduro reaccionó inmediatas movilizando alrededor de 4.5 millones de milicianos y solicitó un diálogo ante la ONU, mientras Estados Unidos impuso sanciones adicionales a funcionarios venezolanos por la continuación del tráfico de narcóticos.
Este ataque representa la tercera incautación de una embarcación venezolana en la región desde que el 7 de septiembre de 2025 Trump calificó el primer derribo como un incidente desafortunado. La operación forma parte de la estrategia de Estados Unidos de cortar las rutas de narcotráfico transpirales que atraviesan el Caribe.
Mientras tanto la campaña internacional en Ucrania avanza con nuevas negociaciones. El 23 de agosto de 2025 Trump impuso una fecha límite a Zelensky y dijo que Estados Unidos no enviaría tropas terrestres a la región, lo que generó debate entre miembros de la OTAN, quienes discutieron el envío de tropas y apoyo logístico.
Desde el punto de vista estratégico, la presencia de destructores en el Caribe no solo muestra la capacidad de respuesta de la Marina sino también la firme postura de Estados Unidos frente al narcotráfico y la agresión regional. La desaparición de la embarcación y la muerte de sus 11 tripulantes son un recordatorio de los riesgos que conlleva la lucha contra el crimen organizado.