El Banco Central de la República Argentina aceleró la reducción de sus tasas de interés, pasando la referencia de 35 % a solo 25 % en respuesta a la reciente emisión del Tesoro de Estados Unidos y al fuerte descenso del dólar oficial que llegó a 210 AR$ el 22 agosto. Esta medida, la más rápida en años, se produce frente a la inflación del 5,3 % y a la caída del Merval en un 15 % a finales de agosto.
Contexto macroeconómico
Al cierre de 2024, el Banco Central había mantenido la tasa de referencia en 44 % y, en agosto de 2025, la incrementó al 48 % el 19 de agosto, antes de la nueva decisión. La presión inflacionaria se mantuvo en 5,3 % en febrero de 2025, mientras la moneda oficial cayó a 210 AR$ el 22 de agosto, igualando el blue a 210 AR$ y ampliando una brecha de 50 AR$.
El mercado registró una caída del Merval de 15 % a finales de agosto de 2025 y un riesgo país que se desplazó por encima de 1 000 puntos entre el 18 y el 19 de agosto.
La decisión del BCRA
El 26 de septiembre de 2025, el BCRA aceleró la reducción de sus tasas de interés, reduciendo la referencia de 35 % a tan solo 25 %. La medida se produjo inmediatamente después de que el Tesoro de Estados Unidos anunciara una nueva emisión de deuda del año, lo que redujo los rendimientos de los bonos y favoreció el descenso del dólar oficial.
Este corte representa el descenso más pronunciado en más de una década y se enfoca principalmente en las tasas de crédito y cobertura de los bancos, con el objetivo de estimular la actividad económica y controlar el flujo de capitales.
Reacciones del mercado
Las acciones del mercado local reacciona positivamente tras la medida: el Merval recupera parte de su caída, mientras que los bonos soberanos experimentan una reducción de más del 15 % en sus rendimientos. La tasa de los plazos fijos en un año se ha ajustado a un 50 % anual, lo que se alinea con la nueva política de tasa de referencia.
Los analistas destacan que el descenso de la tasa de interés favorece a los consumidores que buscan créditos hipotecarios y de consumo, aunque la incertidumbre política y la alta inflación siguen presente como riesgos significativos.
Perspectivas futuras
Con la próxima elección municipal del 7 de septiembre y las elecciones legislativas del 27 de octubre, el escenario político se mantiene volátil. El BCRA ha establecido su objetivo de mantener la inflación bajo control y de estabilizar la moneda oficial en los próximos meses.
En el corto plazo, la expectativa es una posible moderación de la tasa de referencia a 20 % en diciembre, en línea con la política de control de capitales y la necesidad de fomentar la inversión doméstica.