En una alerta pública, autoridades de salud de Santa Fe revelaron que el vector del dengue, Aedes aegypti, fue detectado en ovitrampas instaladas en tres barrios de la ciudad. A pesar de la presencia del mosquito, no se registran casos activos, y la vigilancia continúa para prevenir posibles brotes
El 10 de octubre de 2025 las autoridades sanitarias de la ciudad de Santa Fe comunicaron la detección del mosquito Aedes aegypti en ovitrampas ubicadas en tres barrios del centro urbano. La presencia del vector no coincide con la aparición de casos de dengue activos, lo que indica que el virus no se ha propagado aún en la población.
La detección se realizó durante un programa de vigilancia rutinario llevado a cabo por la Secretaría de Salud de Santa Fe, en coordinación con la Secretaría de Agricultura y Recursos Naturales. Los dispositivos de ovitrampas se colocan en lugares donde los mosquitos depositan sus huevos, permitiendo un monitoreo temprano de su presencia.
Aunque no hay evidencias de infección, las autoridades recuerdan la importancia de la prevención. Se aconsejan actividades como la eliminación de recipientes con agua estancada, la aplicación de larvicidas en charcos permanentes y la vigilancia de la población para reportar síntomas de fiebre y dolor de cabeza.
El Ministerio de Salud de la provincia ha anunciado que continuará con la inspección de más barrios y la instalación de nuevos dispositivos de monitoreo, además de la campaña de educación pública sobre la prevención del dengue y otras enfermedades transmitidas por mosquitos.
Este hallazgo subraya la necesidad de mantener una estrategia de prevención constante, especialmente en zonas donde el vector puede colonizar.
El mensaje central de las autoridades es que la detección temprana de Aedes aegypti es positiva porque permite intervenir antes de que aparezca el virus, reduciendo el riesgo de brotes locales.