En la madrugada del 13 de octubre de 2025, un equipo de ladrones irrumpió en la sala de las joyas de la Corona del Museo del Louvre y se llevó ocho piezas, entre ellas la famosa Corona de la Emperatriz Eugenia. El atraco, ejecutado en menos de diez minutos, dejó la pieza destrozada y ha encendido el debate sobre la seguridad de los tesoros culturales en Francia.
Contexto histórico de la pieza robada
La Corona de la Emperatriz Eugenia de Montijo fue creada en 1855 para la Exposición Universal de París y formó parte de la colección de joyas reales que el propio Napoleón III depositó en el Louvre tras la caída del Segundo Imperio. Eugenia (nacida el 5 de abril de 1826 en Granada, España, y fallecida el 9 de junio de 1920) fue una de las monarcas más influyentes del siglo XIX, conocida por su estilo, su filantropía y su papel como madre de la nación francesa.
Detalles del robo
El atraco se llevó a cabo en la madrugada del 13 de octubre de 2025. Según el informe policial, los delincuentes ingresaron por un pasillo de servicio, desactivaron alarmas y, en menos de siete minutos, rompieron la vitrina que protegía la corona y otras siete joyas. Durante el acto, la corona fue dañada gravemente: la estructura metálica se partió y varios diamantes y perlas fueron arrancados.
Los asaltantes escaparon en dos motocicletas modificadas para el contrabando, tomando una ruta rápida hacia la periferia de París. Uno de los ladrones fue captado por un testigo que grabó brevemente el momento con su celular, y ese video se ha difundido en redes sociales.
Impacto y reacciones
El Ministro de Cultura de Francia, François Rebsamen, declaró que el hecho “es una agresión directa al patrimonio histórico de la humanidad” y anunció una revisión exhaustiva de los protocolos de seguridad de los museos más sensibles. La policía francesa abrió una investigación internacional, y ya se ha emitido una alerta a los principales aeropuertos europeos.
Quién fue Eugenia de Montijo
Eugenia de Montijo (nombre completo: Eugénie de Montijo y Méndez de Zúñiga) nació en una familia aristocrática española y se casó con el futuro emperador Napoleón III el 14 de enero de 1853. Durante su reinado (1852‑1870) impulsó reformas sociales, la modernización de París y la expansión de la influencia francesa en América Latina. Tras la caída del imperio, se exilió en Inglaterra y más tarde se estableció en Le Touquet, donde vivió hasta los 94 años.