El delantero argentino Mauro Icardi despertó polémica en redes sociales después de publicar una foto en la que, según los críticos, no logra alejarse de su esposa Wanda Nara. El gesto, realizado en el marco del Día de la Madre, también incluyó una inesperada referencia a la actriz China Suárez, generando debate entre seguidores y medios.
Contexto de la publicación
El 12 de octubre de 2025, Mauro Icardi, delantero del Galatasaray y exjugador del PSG, compartió en su cuenta de Instagram una fotografía familiar con su esposa Wanda Nara (38 años) y su hija de 4 años. En la imagen, Icardi sostiene a su hija mientras mira fijamente a su esposa, lo que provocó comentarios que acusaban al futbolista de “no poder soltar a Wanda”.
Reacciones en redes
Los usuarios describieron la foto como una demostración de dependencia emocional y comenzaron a especular sobre la vida privada del dúo, que está casado desde 2014. Algunos mensajes subrayaron el vínculo estrecho entre Icardi y Nara, mientras que otros defendieron la expresión de cariño familiar.
El gesto hacia China Suárez
En el mismo post, Icardi incluyó una mención a la actriz China Suárez (33 años), quien también ha sido objeto de atención mediática por su relación con Nara. La publicación contenía la frase «No puede soltar a Wanda», que fue interpretada como un posible guiño a la amistad entre ambas mujeres. La inclusión de Suárez generó un nuevo foco de atención, alimentando la discusión sobre la “internas familiares” de Icardi.
Repercusiones en los medios
Varias publicaciones, entre ellas Infobae, Ciudad Magazine y La Nación, cubrieron el episodio, resaltando tanto la polémica como el impacto de la foto en la percepción pública del futbolista. Algunas columnas señalaron que, a sus 34 años, Icardi sigue siendo uno de los jugadores más mediatizados fuera del terreno de juego.
Conclusiones
La controvertida foto muestra cómo las redes sociales pueden amplificar gestos cotidianos, convirtiéndolos en foco de debate. Mientras los fanáticos continúan apoyando a la familia Icardi‑Nara, los críticos siguen analizando cada detalle de sus publicaciones.