Según informó el Wall Street Journal, el ministro argentino de Relaciones Exteriores, Santiago Caputo, está en conversaciones con el empresario Bessent para ampliar la exportación de uranio argentino a Estados Unidos, una medida que podría reforzar la cooperación nuclear y abrir nuevas oportunidades económicas para el país.
Contexto de la negociación
El Washington Post ha destacado que la creciente demanda de combustible nuclear en EE.UU. ha impulsado la mirada hacia los recursos de uranio de Argentina, uno de los principales productores de América Latina. En este marco, el ministro Caputo habría iniciado diálogos con el empresario Bessent, cuyo grupo está vinculado a la cadena de suministro de materiales nucleares.
Objetivos de la ampliación
Los interlocutores buscan incrementar la cantidad de uranio exportado bajo condiciones que garanticen la seguridad y la trazabilidad del material. Según el Wall Street Journal, la propuesta incluiría acuerdos de suministro a largo plazo, con la posibilidad de establecer una planta de procesamiento parcial en territorio argentino, lo que generaría empleo y transferencia tecnológica.
Implicancias económicas y estratégicas
Para Argentina, la operación representa una oportunidad de diversificar sus exportaciones y captar divisas. Además, la colaboración con EE.UU. podría favorecer la modernización de la infraestructura nuclear del país y la formación de profesionales en el sector.
Reacciones en Quito y Montevideo
Los gobiernos de Perú y Uruguay, también interesados en la cadena de suministro de uranio, han señalado que la iniciativa argentina podría ser un modelo para la región, siempre que se respeten los estándares internacionales de no proliferación.
Próximos pasos
Se espera que en las próximas semanas se firmen acuerdos preliminares que serán revisados por los organismos reguladores de ambos países. La comunidad internacional observará de cerca este proceso, dadas las implicaciones para el mercado global de energía nuclear.