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Descubren que el cerebro sufre cambios críticos minutos después de la muerte

Un estudio reciente revela que, tras la parada circulatoria, el cerebro humano experimenta transformaciones moleculares y eléctricas en los primeros minutos de fallecimiento. Este hallazgo abre nuevas preguntas sobre la muerte cerebral, la donación de órganos y la naturaleza de la conciencia, y podría redirigir futuros enfoques de la neurociencia.

El hallazgo científico

Investigadores de la Universidad de Oxford y el Instituto de Neurología de São Paulo publicaron, en la revista Science Advances, que el tejido cerebral muestra una serie de cambios bioquímicos y eléctricos dentro de los primeros veinte minutos después de la interrupción del flujo sanguíneo. Analizando cerebros de donantes postmortem, detectaron una liberación abrupta de glutamato y una persistencia de potenciales de acción en neuronas específicas.

Implicaciones para la ciencia y la medicina

Estos resultados cuestionan la visión tradicional de que la actividad cerebral cesa de forma instantánea con la muerte clínica. Si las neuronas permanecen funcionales por varios minutos, los protocolos de donación de órganos podrían revisarse para optimizar la preservación cerebral. Además, el estudio revitaliza el debate sobre la definición de muerte cerebral y sus repercusiones éticas.

Contexto y antecedentes

Previos estudios habían documentado la viabilidad de células cerebrales en condiciones de anoxia, pero ninguno había descrito de forma tan detallada la secuencia temporal de eventos eléctricos y químicos tras la muerte. La investigación actual complementa hallazgos de 2022 que mostraban actividad residual en el tronco encefálico durante los primeros segundos después del paro cardíaco.

Próximos pasos

Los autores proponen ampliar la muestra a diferentes grupos etáricos y a poblaciones con patologías neurodegenerativas, para determinar si la dinámica postmortem varía según el estado de salud previo. Asimismo, sugieren explorar intervenciones farmacológicas que puedan retrasar o modular estos procesos, con miras a mejorar la calidad de los órganos donados.