Una adolescente de 16 años de Indianapolis fue hallada en estado de tortura y abuso por la familia que la tenía bajo su cuidado. La policía y los servicios de protección infantil han abierto una investigación para esclarecer los hechos y llevar a los responsables ante la justicia.
Hechos denunciados
Según informó la policía de Indianapolis el 26 de octubre de 2025, una joven de 16 años fue encontrada en condiciones de extrema vulnerabilidad dentro de la vivienda donde vivía con la familia de acogida asignada por el Estado. Los agentes detectaron signos evidentes de tortura física y abuso psicológico, entre los que se incluyen marcas de paliza, contusiones y evidencia de privación de alimentos.
Intervención y acciones legales
Tras el hallazgo, la menor fue trasladada de inmediato a un centro de salud especializado donde recibió atención médica y psicológica. El Departamento de Servicios de Protección Infantil de Indiana tomó la custodia de la joven y abrió un caso formal contra la familia responsable. La investigación penal está a cargo de la Oficina del Fiscal del Condado de Marion, que ya ha emitido órdenes de arresto contra los adultos involucrados.
Contexto de la protección infantil en Indiana
El estado de Indiana registra anualmente más de 25.000 casos de abuso o negligencia infantil, según datos del Departamento de Servicios de Salud y Servicios Humanos. Cuando se detecta una situación de alto riesgo, la normativa establece la intervención inmediata de los servicios sociales y la colaboración con la fuerza policial para garantizar la seguridad del menor.
Repercusiones y llamados a la comunidad
Organizaciones defensoras de derechos infantiles han pedido una revisión exhaustiva del sistema de acogida familiar, argumentando que casos como este ponen en evidencia fallas en los procesos de supervisión y selección de las familias de acogida. Asimismo, la comunidad de Indianapolis ha expresado su solidaridad con la víctima, organizando campañas de recaudación de fondos para apoyar su recuperación.
Próximos pasos
La familia de acogida está siendo procesada bajo cargos de abuso infantil agravado y tortura. La menor permanecerá bajo la protección del Estado mientras se lleva a cabo el proceso judicial. Las autoridades locales reiteran su compromiso de reforzar los mecanismos de control y prevención para evitar que hechos de esta magnitud se repitan.