Expertos destacan que iniciar a tiempo terapias sistémicas o biológicas en pacientes con psoriasis moderada a grave modifica la evolución de la enfermedad y disminuye considerablemente la aparición de artritis psoriásica, mejorando la calidad de vida a largo plazo.
Importancia de la intervención precoz
La psoriasis, una enfermedad inflamatoria crónica de la piel, afecta a alrededor del 2 % de la población mundial. Cuando no se controla, puede progresar a artritis psoriásica, una condición que compromete articulaciones, tendones y la capacidad funcional.
Qué demuestran los estudios recientes
Diversas investigaciones publicadas en revistas dermatológicas y reumatológicas indican que los pacientes que inician tratamiento sistémico (como metotrexato, ciclosporina o fármacos biológicos) dentro de los primeros dos años después del diagnóstico presentan una menor incidencia de artritis psoriásica en los siguientes cinco a diez años. Algunos estudios observan una reducción del riesgo alrededor del 30 %‑40 % respecto a quienes esperan más tiempo para iniciar la terapia.
Tipos de tratamientos recomendados
Los protocolos actuales sugieren:
- Biológicos anti‑TNF, IL‑17 e IL‑23: actúan sobre los mediadores clave de la inflamación y han mostrado mayor eficacia en la prevención de la progresión articular.
- Fármacos de síntesis como metotrexato y ciclosporina: útiles en casos moderados y como puente antes de iniciar biológicos.
- Terapias combinadas y manejo integral con dermatólogos y reumatólogos.
Impacto en la calidad de vida
Más allá de la reducción del daño articular, un control temprano de la psoriasis mejora notablemente aspectos sociales y psicológicos. Pacientes que logran una respuesta clara en la piel reportan mayor autoestima, menor estigmatización y mejor desempeño laboral.
Recomendaciones para pacientes y profesionales
Se insta a los dermatólogos a evaluar la posibilidad de enfermedad articular desde el diagnóstico inicial y a considerar la introducción precoz de terapias sistémicas cuando la gravedad lo justifique. Por su parte, los pacientes deben informar cualquier síntoma articular (dolor, rigidez matutina, hinchazón) a su médico para una valoración temprana.