Este 31 de octubre de 2025 se cumplen medio siglo desde que Queen lanzó Bohemian Rhapsody, una canción que redefinió la producción musical. Descubrí los detalles de su proceso creativo, los retos en el estudio, y el impacto global que la ha mantenido vigente durante cinco décadas.
El contexto de 1975
En 1975 la banda británica Queen ya había alcanzado fama con éxitos como Killer Queen y Now I’m Here. Con la llegada del álbum A Night at the Opera, el grupo buscó superar los límites habituales del rock.
El nacimiento de una obra maestra
Freddie Mercury escribió Bohemian Rhapsody a finales de 1974, inspirándose en la ópera rock y en la estructura de los dramas clásicos. La canción combina una balada, una sección operística y un fragmento de hard rock, algo nunca visto en la radio comercial.
Grabación en Rockfield Studios
Las sesiones se realizaron en el estudio Rockfield, ubicado en Gales, durante julio y agosto de 1975. Cada miembro aportó su parte: Mercury al piano y voz principal, Brian May en guitarra con acordes multitrack, Roger Taylor en batería y coros, y John Deacon en bajo. El productor Roy Thomas Baker dirigió más de 180 pistas de overdubs para crear el coro operístico.
Innovaciones técnicas
Para la parte operística, el equipo utilizó una cinta de 24 pistas, lo que obligó a mezclar y re‑grabar varias veces para conseguir el sonido deseado. Se emplearon efectos de eco y reverb que, en su momento, eran pioneros en la música rock.
Recepción y legado
El sencillo se lanzó el 31 de octubre de 1975 y alcanzó el puesto número uno en el Reino Unido, permaneciendo cinco semanas en la cúspide. En Estados Unidos llegó al puesto nueve, pero tras la película de 1992 volvió a escalar hasta el número uno, convirtiéndose en el único sencillo de la historia en lograrlo dos veces.
Hasta 2025, Bohemian Rhapsody ha vendido más de 6 millones de copias en todo el mundo y está certificada Platino en varios países. Su video, pionero en la era MTV, sigue siendo un referente de la creatividad visual.
50 años después
En el aniversario, los miembros sobrevivientes y la familia de Mercury realizan eventos tributo y lanzan ediciones de vinilo de edición limitada, recordando la canción como un testimonio de innovación y libertad artística.