Tras el paso del huracán Melissa, que dejó a gran parte de Cuba bajo escombros y cientos de desplazados, Estados Unidos anunció una respuesta humanitaria inmediata, marcando una rara muestra de cooperación en medio de la crisis humanitaria que afecta al Caribe.
Contexto del huracán Melissa
El huracán Melissa azotó la isla de Cuba a principios de octubre de 2025, generando vientos de más de 150 km/h y lluvias torrenciales que provocaron inundaciones, cortes de energía y destrucción de infraestructura en varias provincias. Según informes de la Vatican News, en el conjunto del Caribe el fenómeno dejó al menos 10 niños muertos y puso en riesgo a 700 mil personas.
Respuesta de Estados Unidos
El gobierno de Estados Unidos, a través de la Oficina de Asistencia Humanitaria del Departamento de Estado, declaró que enviará ayuda inmediata a Cuba. La oferta incluye suministro de agua potable, alimentos no perecibles, medicinas esenciales y equipos de generación eléctrica, que serán coordinados con la Cruz Roja Internacional y la Protección Civil cubana.
Impacto en la isla
Las autoridades cubanas reportan que decenas de comunidades quedaron aisladas y que cientos de miles de residentes se encuentran sin acceso a servicios básicos. El Ministerio del Interior ha activado los planes de emergencia para la evacuación y el alojamiento temporal de los damnificados.
Repercusiones diplomáticas
Esta iniciativa marca una importante señal de apertura en las relaciones bilaterales, que históricamente han sido tensas. Analistas de política exterior destacan que la cooperación humanitaria podría abrir espacios para futuros diálogos en áreas como la migración y el comercio.
Mientras tanto, la comunidad internacional sigue monitoreando la evolución de la situación y convoca a la región a reforzar los mecanismos de ayuda mutua frente a fenómenos climáticos cada vez más intensos.