El nuevo ministro del Interior, Guillermo Francos, sostuvo una emotiva reunión de transición con el ex jefe de Gabinete, Manuel Adorni, y se despidió de la Casa Rosada en un acto cargado de simbolismo político.
Reunión de transición en la Casa Rosada
El Guillermo Francos, recientemente designado como Ministro del Interior, se reunió con Manuel Adorni, quien ejerció como Jefe de Gabinete durante la gestión anterior. El encuentro tuvo lugar en la Casa Rosada, sede del Poder Ejecutivo, y marcó el cierre de la etapa de gobierno saliente.
Durante la reunión, ambos funcionarios abordaron los desafíos de la transición y la necesidad de mantener la continuidad institucional. Francos expresó su agradecimiento a Adorni por su labor y, visiblemente emocionado, le dio la bienvenida a la nueva administración.
Despedida simbólica
Al concluir el encuentro, Francos se despidió de la Casa Rosada, símbolo del poder ejecutivo argentino, con una breve intervención que resaltó la importancia de la unidad y el respeto a las instituciones. La escena se volvió viral en redes sociales, reflejando el peso simbólico del momento para la política nacional.
Reacciones de otros actores políticos
En otras declaraciones vinculadas al mismo proceso, Manuel Adorni respondió a las críticas de Mauricio Macri afirmando que “el Gabinete lo elige el Presidente”, destacando la autonomía del Ejecutivo para conformar su equipo.
Por su parte, Juan José Sáenz, dirigente del Partido Frente de Todos, comentó sobre el nuevo gabinete, subrayando su esperanza de una “mirada federal” pese a la preponderancia de funcionarios de la provincia de Buenos Aires.
Contexto de la transición
La reunión de Francos y Adorni se inscribe dentro del cronograma de transición que sigue a la asunción del nuevo presidente, cuya agenda incluye la conformación de un gabinete que balancee representación regional y experiencia técnica. La visita de Lisandro Catalán, actual Jefe de Gabinete, a la Casa Rosada el mismo día subraya la coordinación entre diferentes áreas del Ejecutivo.
Estas instancias reflejan la costumbre democrática de organizar sesiones de trabajo extraordinarias para garantizar una transferencia ordenada de responsabilidades, procesos que han sido esenciales en la historia política reciente de Argentina.