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Descubren el Trastorno Facticio: Cómo la Enfermedad Invisible Engaña a los Médicos

El trastorno facticio, una condición psicológica en la que la persona finge o induce síntomas físicos, sigue siendo un desafío para la comunidad médica. Conocer sus características, prevalencia y criterios de detección es clave para evitar diagnósticos erróneos y ofrecer la atención adecuada a tiempo.

¿Qué es el trastorno facticio?

El trastorno facticio, también llamado “síndrome de Munchausen”, es una enfermedad mental en la que el individuo produce, falsifica o exagera síntomas físicos o psicológicos sin un beneficio externo evidente, como dinero o atención legal. A diferencia de la simulación consciente con motivaciones externas, el impulso del trastorno facticio responde a una necesidad interna de ser percibido como enfermo.

Prevalencia y grupos de riesgo

Los estudios epidemiológicos estiman que entre el 0,5 % y 2 % de la población general podría presentar este trastorno en algún momento de su vida. En entornos hospitalarios, la cifra aumenta, representando entre el 10 % y 20 % de los ingresos psiquiátricos y del 5 % al 15 % de los pacientes con diagnósticos médicos inexplicables.

Señales de alerta para los profesionales de salud

  • Patrones de enfermedad crónica que no responden a tratamientos estándar.
  • Historia médica extensa con múltiples pruebas innecesarias.
  • Inconsistencias entre los hallazgos clínicos y los resultados de exámenes.
  • Falta de evidencia objetiva que sustente los síntomas reportados.
  • Comportamiento que busca la atención constante de personal sanitario.

Cómo se llega al diagnóstico

El diagnóstico de trastorno facticio es de exclusión y requiere una evaluación exhaustiva que incluya:

  1. Revisión de todos los antecedentes médicos y quirúrgicos.
  2. Confirmación de la ausencia de patologías orgánicas mediante pruebas diagnósticas apropiadas.
  3. Entrevistas psicodiagnósticas que exploren motivaciones internas y posibles trastornos comórbidos, como trastorno de personalidad límite o depresión.

Recomendaciones de tratamiento

El abordaje terapéutico combina psicoterapia (principalmente terapia cognitivo‑conductual) y, cuando corresponde, tratamiento farmacológico para trastornos asociados. La intervención temprana mejora el pronóstico y reduce la exposición del paciente a procedimientos invasivos innecesarios.

Importancia de la concienciación

Comprender el trastorno facticio permite a médicos, enfermeros y familiares reconocer la condición antes de que se convierta en una carga clínica y económica significativa. La capacitación continua en salud mental y la colaboración interdisciplinaria son esenciales para una detección oportuna y un manejo compasivo.