Los jugadores de San Lorenzo de Almagro emitieron un comunicado contundente al anunciar que el plantel sufre de salarios impagos, comidas inadecuadas y la ausencia de agua caliente en vestuarios. La situación, calificada como insostenible, pone en evidencia la profunda crisis financiera que atraviesa el club argentino.
El mensaje del plantel
En un comunicado oficial, los futbolistas de San Lorenzo dejaron al descubierto la grave falta de recursos básicos en el club. Señalan que los sueldos no se han pagado en varios meses, que la alimentación proporcionada es insuficiente y que ni siquiera disponen de agua caliente para ducharse después de los entrenamientos.
Datos que aparecen en el comunicado
- Salarios atrasados desde hace varios meses.
- Comidas de baja calidad que no cubren las necesidades nutricionales de los jugadores.
- Falta de agua caliente en vestuarios y áreas de higiene.
- Denuncia de una situación que describen como “insostenible” y que exige una solución inmediata.
Contexto de la crisis
San Lorenzo, uno de los cinco grandes del fútbol argentino, atraviesa una profunda crisis económica que se refleja en la pérdida de patrocinadores, deudas acumuladas y dificultades para cumplir con sus obligaciones contractuales. La falta de pago de sueldos es una práctica que ha afectado a varios clubes del país en la última década, vinculada a la recesión económica y a la caída de los ingresos por derechos televisivos.
Qué es el plantel
El término “plantel” se refiere al conjunto de jugadores, cuerpo técnico y personal de apoyo que conforman el equipo deportivo. Cuando el plantel emite un comunicado conjunto, se trata de una postura unificada que busca presionar a la directiva para que tome medidas inmediatas.
Reacciones y expectativas
La directiva de San Lorenzo aún no ha respondido públicamente al comunicado. Analistas del fútbol argentino advierten que la ausencia de una solución rápida podría derivar en sanciones de la AFA, posibles huelgas de jugadores o incluso la deserción de talentos hacia equipos extranjeros.
Los aficionados y la prensa siguen atentos a cualquier movimiento del club, mientras la presión social y mediática aumenta para que se garantice el cumplimiento de los derechos laborales de los futbolistas.