El ministro de Economía, Luis Caputo, ratificó que el gobierno mantendrá el esquema de bandas de flotación para el dólar, advirtiendo que la liberación total del tipo de cambio no es viable y destacando la necesidad de acumular mayores reservas internacionales.
Continuidad del esquema de bandas de flotación
En una rueda de prensa celebrada el 13 de noviembre de 2025, Luis Caputo confirmó que el Gobierno argentino mantendrá vigente el esquema de bandas de flotación para el dólar. Este mecanismo, implementado a finales de 2024, permite que el tipo de cambio se mueva dentro de un rango predefinido, reduciendo la volatilidad sin llegar a una libre flotación total.
Razones para no liberar el tipo de cambio
Caputo expuso cinco argumentos clave para sostener que la liberalización completa del dólar sería perjudicial:
- Inestabilidad macroeconómica: La alta inflación y la volatilidad política hacen que una flotación libre pueda desencadenar fuertes variaciones del tipo de cambio.
- Riesgo de fuga de capitales: Un tipo de cambio sin control podría acelerar la salida de divisas y agotar las reservas internacionales.
- Protección de la competitividad: Mantener una cotización controlada ayuda a preservar la competitividad de las exportaciones.
- Credibilidad externa: Los mercados internacionales valoran la existencia de un marco de referencia estable.
- Política monetaria efectiva: El Banco Central necesita un rango de precios para operar con mayor predictibilidad.
Acumulación de reservas internacionales
El ministro aseguró que el Gobierno tiene la intención de seguir acumulando “más reservas de lo que cualquiera puede estar pensando”, con el objetivo de reforzar el colchón cambiario y dar mayor confianza a inversores y operadores del mercado.
Comparación internacional
Caputo recordó que, en la mayoría de los países, el dólar no flota libremente y que Argentina no debe “agrandarse” respecto a sus posibilidades. Subrayó que la política cambiaria debe adaptarse a la realidad económica y política del país.
Conclusión
La decisión de mantener el esquema de bandas de flotación muestra la intención del Gobierno de equilibrar la estabilidad cambiaria con la necesidad de acumular reservas, evitando riesgos asociados a una libre flotación en un contexto de alta volatilidad política y económica.