En una operación sin precedentes, la CNSA envió la nave Shenzhou‑21 para socorrer a la tripulación de la Shenzhou‑20, que sufrió fallas técnicas. Los tres astronautas quedaron varados en órbita y ahora esperan la cápsula de retorno que les permitirá volver a la Tierra.
Contexto del rescate
La misión Shenzhou‑20 había protagonizado la primera visita tripulada a la estación espacial Tiángōng tras su lanzamiento en mayo de 2023. A mitad de su estancia, sensores críticos detectaron anomalías en el módulo de servicio, obligando a la nave a permanecer en órbita sin poder iniciar el proceso de regreso.
La respuesta de la CNSA
Ante la emergencia, la Administración Nacional del Espacio de China (CNSA) preparó y lanzó la Shenzhou‑21 a principios de noviembre de 2025. La nave, diseñada para albergar tres tripulantes, partió con el objetivo de acoplarse a la Shenzhou‑20, transferir a la tripulación y proporcionar una ruta segura de regreso.
Operación de acoplamiento y situación actual
El acoplamiento se completó con éxito el 5 de noviembre de 2025. Los astronautas, después de pasar unas horas en traje de presión para la transferencia, quedaron a bordo de la Shenzhou‑21. Sin embargo, la cápsula de retorno, elemento esencial para la reentrada atmosférica, sufrió un retraso en su preparación debido a la misma serie de fallas que afectaron a la Shenzhou‑20.
Con la cápsula aún en proceso de inspección y reparación, la tripulación se encuentra ahora varada en órbita, sobreviviendo con los suministros de la Shenzhou‑21 mientras esperan la autorización para iniciar el descenso.</n
Los controladores de la misión aseguran que se trata de la primera crisis de un programa espacial tripulado chino donde se ha tenido que ejecutar un rescate in situ, y destacan la rapidez con la que se logró el acoplamiento en comparación con procedimientos similares de otras agencias.
Qué implica para el programa espacial chino
Este episodio pone de relieve los retos técnicos que enfrenta la CNSA en su ambición de lanzar misiones más largas y complejas. El éxito del acoplamiento demuestra avances en la tecnología de rendezvous y docking (acoplamiento), mientras que la necesidad de una cápsula de retorno fiable subraya la importancia de los sistemas de seguridad a bordo.
Expertos internacionales señalan que, aunque la situación genera incertidumbre, el hecho de que China haya gestionado el rescate sin perder vidas es un hito que podría reforzar la confianza en sus futuras misiones a la Luna y, potencialmente, a Marte.
Próximos pasos
Se espera que la CNSA emita una ventana de lanzamiento para la cápsula de retorno antes del final de noviembre de 2025. Mientras tanto, la tripulación realizará actividades de mantenimiento y experimentos científicos limitados a bordo, manteniendo los sistemas operativos en óptimas condiciones.