El presidente del Banco Central, Luis Caputo, ha puesto en marcha una política de adquisiciones discretas de dólares para ampliar las reservas internacionales sin mover el tipo de cambio. La medida se basa en cuatro mecanismos que le permiten absorber divisas sin alertar al mercado, reforzando la posición financiera de Argentina en medio de alta volatilidad cambiaria.
Contexto económico
Argentina atraviesa una etapa de presión sobre su tipo de cambio, con una alta demanda de dólares por parte de importadores, viajeros y agentes del mercado financiero. Ante este escenario, el Gobierno busca fortalecer sus reservas internacionales para garantizar la estabilidad macroeconómica y evitar rupturas de financiamiento.
Estrategia de “compras silenciosas”
El ministro de Economía, Luis Caputo, anunció la puesta en marcha de lo que los analistas denominan compras silenciosas: intervenciones en el mercado de cambios realizadas mediante instrumentos financieros que no alteran de forma visible la cotización del dólar. La estrategia se articula en cuatro “canillas” principales:
- Operaciones de mercado abierto (OMA): el Banco Central compra dólares a través de operaciones de compra‑venta de bonos del Tesoro, absorbiendo la divisa cuando se presentan ofertas en el mercado.
- Swaps de cobertura: se negocian acuerdos de swap con bancos locales, permitiendo que estos conviertan sus tenencias de dólares en pesos a una tasa preestablecida, sin que la operación se refleje inmediatamente en la cotización oficial.
- Bonos con cláusula de ajuste (BCA): emisión de bonos cuya rentabilidad se ajusta en función de la evolución del dólar, lo que incentiva a los inversionistas a vender dólares al Tesoro a cambio de títulos de mayor rendimiento.
- Acuerdos bilaterales con proveedores: mediante contratos de suministro de materias primas se pactan pagos en dólares que se depositan directamente en las reservas, sin necesidad de pasar por el mercado cambiario tradicional.
Impacto en las reservas
Según los últimos comunicados oficiales, en los últimos meses el Tesoro ha incorporado a la cartera de reservas una suma considerable de dólares, sin que ello haya generado una variación significativa en la cotización oficial del tipo de cambio. La discreción de la operación permite al Gobierno acumular divisas mientras mantiene la percepción de estabilidad cambiaria.
Reacciones y perspectivas
Analistas financieros valoran positivamente la medida, señalando que la capacidad de acumular reservas sin desestabilizar el mercado brinda mayor margen de maniobra al Banco Central para enfrentar posibles shocks externos. Por su parte, algunos críticos advierten que la falta de transparencia podría dificultar la evaluación de la efectividad de la política a largo plazo.
En cualquier caso, la estrategia de Caputo se inscribe dentro de un conjunto de herramientas que buscan proteger la economía argentina en un contexto de alta incertidumbre internacional.