El asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi en el consulado de Arabia Saudí en Estambul el 2 de octubre de 2018 sigue generando controversia y revela la estrecha relación entre el expresidente estadounidense Donald Trump y el príncipe heredero Mohammed bin Salman, reforzada mediante una cena presidencial y discursos de apoyo pese a la evidencia internacional.
Contexto del asesinato de Jamal Khashoggi
Jamal Khashoggi, columnista del Washington Post y crítico abierto del príncipe heredero saudí Mohammed bin Salman (MBS), fue asesinado el 2 de octubre de 2018 dentro del consulado saudí en Estambul, Turquía. Investigaciones de la CIA y de la fiscalía sueca concluyeron que el asesinato fue planeado y ejecutado por agentes vinculados directamente al gobierno saudí. El caso desencadenó una ola de condenas internacionales y sanciones puntuales contra funcionarios saudíes.
El abrazo político entre Trump y bin Salman
En mayo de 2017, Donald Trump visitó Arabia Saudí y organizó una cena en la que se reunió con cientos de empresarios, legisladores y el propio bin Salman. La imagen del presidente estadounidense estrechando la mano al príncipe heredero se difundió como símbolo de la alianza estratégica entre EE. UU. y el reino del Golfo, enfocada en ventas de armas y energía.
Defensa pública de Trump tras el asesinato
Tras la publicación del informe de la CIA, que señaló la responsabilidad directa de MBS, Trump describió el asesinato como “un trágico incidente” y minimizó la implicación del príncipe. En una entrevista en 2019, el expresidente afirmó que los lazos comerciales y de seguridad con Arabia Saudí eran más importantes que el caso, intentando preservar la relación bilateral.
Repercusiones internacionales y económicas
El escándalo afectó la reputación de los contratos de armas estadounidenses con Arabia Saudí, aunque la venta de sistemas F‑35 y de armamento convencional continuó. La presión de grupos de derechos humanos y de algunos congresistas estadounidenses buscó limitar futuros acuerdos, pero el ejecutivo de Trump mantuvo la política de “Saudi first” hasta el final de su mandato.
Lecciones y antecedentes
El caso Khashoggi ilustra cómo los intereses geopolíticos pueden sobreponerse a los valores democráticos y de derechos humanos. Asimismo, muestra la vulnerabilidad de las democracias frente a alianzas económicas con regímenes autoritarios, tema que sigue vigente en la agenda internacional.