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¿Con qué frecuencia debes lavar las sábanas? Descubre el impacto del microbioma de la cama en tu descanso

Expertos en dermatología y sueño revelan que el lavado de sábanas influye directamente en la salud de la piel y la calidad del sueño. Conoce la frecuencia recomendada, los factores que hacen variar el intervalo y cómo el microbioma de la cama puede afectar tu bienestar nocturno.

El microbioma de la cama: un ecosistema invisible

La superficie de la ropa de cama alberga una gran cantidad de microorganismos — bacterias, hongos y ácaros — que forman el llamado microbioma de la cama. Este ecosistema está en constante interacción con la piel, el sudor y los residuos de células mortas que desprendemos mientras dormimos. Un microbioma equilibrado favorece la salud cutánea y reduce alergias, mientras que un desequilibrio puede provocar irritaciones, acné o molestias respiratorias.

¿Cada cuánto se deben lavar las sábanas?

Según el dermatólogo Dr. Jorge Silva, citado por Infobae, la frecuencia ideal de lavado depende de tres variables clave:

  • Sudoración y temperatura corporal: personas que sudan mucho o que duermen en climas cálidos deberían lavar sus sábanas cada siete a diez días.
  • Presencia de alergias o afecciones cutáneas: quienes padecen eczema, dermatitis o rinitis alérgica pueden beneficiarse de un intervalo de siete a ocho días.
  • Tipo de colchón y fundas: materiales transpirables y fundas anti‑ácaros prolongan ligeramente el tiempo entre lavados.

El informe de La Nación aclara que la práctica de cambiar sábanas cada mes o cada dos semanas es una regla genérica que no se ajusta a la diversidad de hábitos. En promedio, el experto recomienda un intervalo de ocho a diez días, ajustable según las condiciones antes mencionadas.

Consejos para un lavado efectivo

1. Utiliza agua tibia (entre 40 °C y 60 °C) para eliminar la mayoría de los bacterias y ácaros.
2. Emplea detergentes con enzimas que descomponen la proteína del sudor.
3. Evita el exceso de suavizante, ya que puede dejar residuos que favorecen la proliferación microbiana.
4. Seca las sábanas al sol siempre que sea posible; la radiación UV ayuda a reducir la carga microbiana.

Impacto en la calidad del sueño

Un estudio publicado en la revista Sleep Medicine demostró que los participantes que cambiaban sus sábanas cada ocho días reportaron un 15 % más de tiempo profundo de sueño y una disminución del 20 % en despertares nocturnos, en comparación con quienes esperaban más de dos semanas para lavar la ropa de cama.

En síntesis, el lavado regular de sábanas no solo mantiene la apariencia estética de la cama, sino que constituye una pieza clave de la higiene del sueño y de la salud dermatológica.