El Estado anunció un aumento en el mínimo imponible del impuesto al lujo, lo que implica que más vehículos de alta gama pasarán a tributar por este gravamen. La medida busca ampliar la base recaudatoria y podría modificar los precios de modelos como Audi, BMW y Mercedes.
¿Qué cambia en el impuesto al lujo?
El Gobierno argentino dictó una nueva normativa que eleva el umbral mínimo a partir del cual los automóviles son considerados de lujo a efectos del impuesto. Con este ajuste, un mayor número de vehículos premium quedarán obligados a pagar el tributo, que anteriormente solo alcanzaba a los modelos más costosos.
Impacto en el mercado automotor
Según los analistas, la medida podría repercutir en la oferta y la demanda de marcas como Audi, BMW, Mercedes‑Benz, Lexus y Porsche. Algunos concesionarios ya avisan ajustes de precios para adaptarse al nuevo esquema tributario.
¿Cómo se calcula el impuesto?
El impuesto al lujo se determina sobre la base del valor del vehículo y se aplica una alícuota progresiva. Al elevarse el mínimo imponible, se reduce la “zona libre” de tributación, lo que implica que más automóviles entrarán en la escala gravable.
Reacciones del sector
Los representantes de la industria automotriz han manifestado su preocupación por un posible encarecimiento de los autos de alta gama, aunque también señalan que la medida podría incentivar la renovación de la flota con modelos más eficientes energéticamente.
Contexto fiscal
Esta decisión se enmarca dentro de la estrategia del Estado de ampliar la recaudación tributaria en un momento de equilibrio fiscal delicado. El impuesto al lujo, creado en años anteriores, ha sido una herramienta para gravar el consumo de bienes de alto valor.
¿Qué modelos podrían beneficiarse?
Algunos expertos indican que ciertos vehículos que estaban justo por debajo del umbral anterior podrían ahora quedar exentos, generando una posible baja de precios para esos modelos específicos.