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Moho negro de Chernóbil parece alimentarse de radiación y podría proteger a astronautas

Científicos han descubierto un hongo melanizado en la zona de exclusión de Chernóbil que crece más rápido bajo radiación. El organismo, conocido como ‘moho negro’, usaría la melanina para convertir la energía ionizante en química, una capacidad que abre posibilidades para la descontaminación nuclear y la protección contra la radiación en misiones espaciales.

Un hallazgo sorprendente en la zona de exclusión

En los terrenos abandonados tras el accidente de la central nuclear de Chernóbil, investigadores observaron un hongo negro que mostró un comportamiento inusual: su ritmo de crecimiento se acelera cuando está expuesto a niveles elevados de radiación.

¿Qué es la radiotrofia?

La radiotrofia es la capacidad de algunos organismos de aprovechar la radiación ionizante como fuente de energía. En los hongos melanizados, la melanina actúa como un fotoconductor que captura la energía de los rayos gamma y la transforma en procesos metabólicos, similar a lo que ocurre en la fotosíntesis con la luz visible.

Características del moho negro

  • Coloración: profundo negro debido a altas concentraciones de melanina.
  • Entorno: crece sobre superficies metálicas y hormigón contaminados dentro del Área de Exclusión.
  • Comportamiento: proliferación significativamente mayor en zonas con radiactividad de varios cientos de microsieverts por hora.

Potenciales aplicaciones

El descubrimiento abre dos líneas de investigación prometedoras:

  1. Bioremediación: Uso del hongo para estabilizar o capturar material radiactivo, reduciendo la propagación de la contaminación.
  2. Escudos radiológicos para la exploración espacial: La NASA está evaluando la incorporación de melanina de estos hongos en materiales compuestos para proteger a astronautas durante viajes de larga duración, como misiones a Marte.

Perspectivas futuras

Los investigadores continúan estudiando los mecanismos moleculares que permiten al moho negro convertir la radiación en energía utilizable. Si se logra replicar o potenciar esta capacidad, podríamos contar con una herramienta biológica única para enfrentar desafíos tanto en la Tierra como más allá de ella.