El Departamento de Estado de EE. UU. responsabilizó al presidente venezolano Nicolás Maduro por la muerte en prisión del ex gobernador opositor Alfredo Díaz, denunciando una “política de represión” que violó los derechos humanos y anunciando nuevas sanciones contra funcionarios del régimen.
Antecedentes de la tragedia
Alfredo Díaz, ex gobernador del estado Apure y dirigente destacado de la oposición venezolana, fue detenido en 2023 bajo la acusación de conspirar contra el gobierno de Nicolás Maduro. Tras pasar más de un año recluido en la cárcel de San Carlos, Díaz falleció el 6 de noviembre de 2024, según informó la BBC. Las autoridades venezolanas declararon que la causa de la muerte fue una “enfermedad natural”, pero familiares y organizaciones de derechos humanos denunciaron negligencia médica y torturas.
Respuesta de los Estados Unidos
En una declaración emitida el 5 de diciembre de 2025, el Departamento de Estado de EE. UU., encabezado por la secretaria de Estado Antony Blinken, afirmó que el fallecimiento de Díaz es “el resultado directo de una política de represión sistemática” impulsada por el régimen de Maduro. La administración estadounidense responsabiliza a Maduro y a altos funcionarios de su gobierno por violar la Convención contra la Tortura y otros tratados internacionales.
Sanciones y medidas consecuentes
Como reacción, EE. UU. impuso nuevas sanciones económicas contra varios miembros del gabinete de Maduro, congelando sus bienes en jurisdicciones estadounidenses y prohibiendo a ciudadanos y empresas estadounidenses realizar transacciones con ellos. Además, se anunció la ampliación de la lista de personas políticamente expuestas (PEP) vinculadas a violaciones de derechos humanos en Venezuela.
Reacción internacional y regional
La Unión Europea, a través de su Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE), y varios países latinoamericanos, como Colombia y Brasil, se sumaron a la condena, exigiendo una investigación independiente sobre la muerte de Díaz y solicitando la liberación de los presos políticos. Organizaciones como Amnistía Internacional y Human Rights Watch ya habían documentado casos similares de represalias contra opositores en Venezuela.
Impacto interno
En Venezuela, la medida generó protestas en la capital y en el estado Apure, donde simpatizantes de Díaz exigieron justicia y el fin de la persecución política. La oposición, liderada por Juan Guaidó en el exilio, declaró que la muerte de Díaz “ilustra la gravedad de la crisis humanitaria y política que vive el país”.
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