La historia de amor entre la estrella global Shakira y Antonio de la Rúa, hijo del expresidente argentino Fernando de la Rúa, fue una telenovela mediática que duró más de diez años, acompañó al artista en su ascenso internacional y terminó cuando la cantante inició una nueva etapa con el futbolista Gerard Piqué.
Una unión inesperada entre música y política
En el año 2000 la cantante colombiana Shakira Isabel Mebarak Ripoll, entonces emergente en la escena latina, conoció a Antonio de la Rúa, hijo del expresidente argentino Fernando de la Rúa. Antonio, nacido el 22 de marzo de 1980, había sido considerado la mano derecha de su padre durante la presidencia (1999‑2001) y desempeñó roles de asesor político y empresario.
El vínculo rápidamente se convirtió en el foco de la prensa internacional: Shakira, con éxitos como “Whenever, Wherever” (2001) y “Hips Don’t Lie” (2006), conquistaba audiencias globales, mientras que Antonio adquiría notoriedad por su proximidad al poder.
Una relación de más de una década
La pareja mantuvo su relación durante aproximadamente once años, hasta el 2011, cuando surgieron los rumores de la cercanía entre Shakira y el futbolista español Gerard Piqué. En ese mismo año, Shakira anunció oficialmente la ruptura con Antonio, generando una cobertura mediática comparada con una telenovela.
El legado de la unión
Aunque la relación terminó, en 2013 nació su hijo Milan de la Rúa, el 28 de enero, fruto de una breve reconciliación antes de la separación definitiva. Desde entonces, Shakira ha consolidado su carrera con álbumes como “El Dorado” (2017) y ha continuado su labor filantrópica a través de la Fundación Pies Descalzos.
Contexto político de la familia de la Rúa
Fernando de la Rúa, presidente de Argentina entre diciembre de 1999 y diciembre de 2001, enfrentó una profunda crisis económica que culminó en la renuncia y la declaración de estado de sitio. Antonio, como figura cercana al gobierno, se vio envuelto en decisiones clave y mantuvo una presencia constante en los medios argentinos durante ese periodo.
La historia de Shakira y Antonio de la Rúa sigue siendo un referente de cómo la fama musical puede entrelazarse con la política y el espectáculo, manteniendo a la audiencia atenta a cada nuevo capítulo.