El Ejecutivo presentó el proyecto de reforma laboral que incluye una rebaja de impuestos a la industria electrónica, una reducción del impuesto a las ganancias para empresas y la creación de un Mini RIGI. La medida genera fuerte reacción en la CGT, mientras la ministra Patricia Bullrich impulsa su paso rápido por el Senado.
Texto de la reforma laboral: los puntos clave
El Gobierno entregó al Congreso el borrador de la reforma laboral que, entre otras cosas, propone:
- Disminuir la alícuota del impuesto a los ingresos brutos para la fabricación y comercialización de equipos electrónicos.
- Reducir la tasa del impuesto a las ganancias corporativas, buscando aliviar la carga fiscal de las empresas.
- Crear un Mini Régimen de Información y Gestión de Inversiones (Mini RIGI) que simplifica la presentación de ciertos tributos.
Reacción de los sindicatos
La Confederación General del Trabajo (CGT) anunció que estudiará detenidamente cada una de las medidas y ya advirtió una postura crítica, calificando la reforma de “poco amigable” para los trabajadores y advirtiendo que podría afectar la negociación colectiva.
Impulso legislativo desde la cartera de Seguridad
Patricia Bullrich, ministra de Seguridad, pidió un trámite exprés en el Senado para acelerar la discusión del proyecto. Bullrich señaló que la velocidad es clave para generar certeza a los inversores y dinamizar el mercado laboral.
Perspectivas y críticas
Expertos señalan que la reforma no está diseñada para crear empleos directamente, pero sí para eliminar distorsiones impositivas y reducir costos operativos. La Voz del Interior describió la propuesta como “ni fomenta ni destruye empleos”, subrayando su carácter neutral en términos de generación de puestos de trabajo.
Próximos pasos
El proyecto ingresará a la comisión de Trabajo del Senado, donde será debatido y, de ser aprobado, pasará al voto definitivo. Mientras tanto, la agenda económica del Gobierno incluye otras iniciativas tributarias que buscan estimular la inversión y el consumo.