Nicolás Occhiato, Mario Pergolini y Pedro Rosemblat irrumpieron en el escenario de los Martín Fierro de Streaming, acusando al conglomerado mediático OLGA de manipular la votación mediante pagos y favoritismo, generando una polémica que pone en tela de juicio la transparencia del premio.
Contexto del premio Martín Fierro de Streaming
Los Martín Fierro de Streaming son la rama digital de los tradicionales premios argentinos que reconocen la excelencia en contenidos creados para plataformas de video bajo demanda. 2025 marcó su edición inaugural, con una ceremonia transmitida en vivo el 8 de diciembre de 2025, y la participación de más de 150 producciones.
Las acusaciones contra OLGA
Durante una entrevista emitida el 9 de diciembre de 2025, el productor Nicolás Occhiato, el veterano comunicador Mario Pergolini y el filósofo mediático Pedro Rosemblat criticaron públicamente al grupo mediático OLGA, propietaria de varios canales de televisión y servicios de streaming. Argumentaron que la empresa pagó para asegurar votos a sus propios contenidos, describiendo la práctica como “plata para los que ya la tienen y, encima, heredada”.
Reacción de la industria
Los comentarios desataron una serie de respuestas:
- Varios jurados y representantes de la Academia de Artes y Ciencias de la Televisión se manifestaron en defensa de la integridad del proceso de votación.
- Productores independientes demandaron mayor transparencia y proponían auditorías externas.
Repercusiones y próximos pasos
Ante la polémica, la organización del premio anunció la creación de un comité independiente que evaluará las denuncias y, de ser necesario, revisará los resultados. Asimismo, se abrió un plazo de 15 días (hasta el 24 de diciembre de 2025) para que cualquier participante pueda presentar pruebas de irregularidades.
¿Qué significa para el futuro del streaming argentino?
El debate pone de relieve la necesidad de fortalecer los mecanismos de votación en premios digitales, garantizando que la competencia se base en la calidad y no en la capacidad de influir económicamente. La discusión también abre la puerta a una mayor regulación del sector por parte de organismos como la Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC).