El gobierno francés, encabezado por el presidente Emmanuel Macron, ha pedido a la Unión Europea que aplace la firma del ambicioso acuerdo de libre comercio con el bloque sudamericano Mercosur, citando graves dudas sobre la protección ambiental y los derechos laborales. La petición, realizada en junio de 2024, complica las expectativas de un acuerdo que llevaba años en negociación.
Contexto del acuerdo UE‑Mercosur
El tratado de libre comercio entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur –formado por Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay– quedó técnicamente concluido en 2019, pero su ratificación se ha visto frenada por fuertes oposiciones en varios parlamentos europeos. La UE había programado la firma definitiva para 10 de junio de 2024 durante la cumbre de líderes europeos en Bruselas.
Razones de Francia para pedir el aplazamiento
El ministro de Asuntos Exteriores francés, Catherine Colonna, anunció que Francia considerará “inaceptable” la firma del acuerdo en su forma actual porque no garantiza:
- Compromisos vinculantes para frenar la deforestación en la Amazonía brasileña.
- Protecciones efectivas de los derechos laborales en las cadenas de suministro.
- Medidas claras para cumplir con los objetivos climáticos del Acuerdo de París.
Francia insiste en que se incluya un capítulo robusto sobre sostenibilidad antes de avanzar.
Reacciones dentro de la UE
Otros estados miembros, como Alemania y los Países Bajos, han manifestado su deseo de mantener el calendario previsto, argumentando que el acuerdo abriría mercados de más de 800 millones de consumidores y generaría un incremento estimado del 30 % en el comercio bilateral. Sin embargo, el presidente español Pedro Sánchez también ha pedido una revisión de los criterios medioambientales, alineándose parcialmente con Francia.
Impacto para los países del Mercosur
Los gobiernos de Brasil y Argentina temen que la postergación pueda retrasar beneficios económicos esperados, como la reducción de aranceles en productos agrícolas y automotrices. El ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Maria Luíza Ribeiro, calificó la petición francesa como “un obstáculo inesperado pero negociable”.
Próximos pasos
El Consejo Europeo estudiará la solicitud francesa en su próxima reunión, prevista para 17 de junio de 2024. Se espera que se abra un nuevo proceso de negociación sobre las cláusulas de medio ambiente, lo que podría alargar la firma hasta finales de año o incluso 2025.