La reforma laboral aprobada este año introduce una serie de modificaciones tributarias que afectan al impuesto a las ganancias, al IVA y a los gravámenes internos. Se detallan los cambios uno por uno, su objetivo de dinamizar la economía y el impacto esperado en consumidores, empresas y sectores como la vivienda y el automovilismo.
Contexto de la reforma laboral
El proyecto de reforma laboral, impulsado por el Congreso en 2025, busca flexibilizar el mercado de trabajo y, simultáneamente, ajustar la carga impositiva para estimular la inversión y el consumo. Además de los cambios en la normativa laboral, el paquete incluye reformas tributarias que afectan directamente a los contribuyentes.
Impuesto a las Ganancias
Se incrementa el mínimo no imponible, lo que significa que los contribuyentes con ingresos más bajos quedan fuera del alcance del impuesto. Asimismo, se reducen los tramos de alícuota para los rangos medios, aliviando la presión fiscal de millones de hogares. En el caso de las grandes empresas, el ajuste se traduce en una disminución de la tasa efectiva, aunque parte de la disminución se compensa mediante un aporte a fondos de desarrollo productivo, según explica La Política Online.
Modificaciones al IVA
El impuesto al valor agregado mantiene su tasa general del 21 %, pero se amplían las exenciones y reducciones a bienes de primera necesidad, como alimentos básicos y medicamentos. Además, se establecen regímenes simplificados para pequeñas y medianas empresas, con el objetivo de reducir la carga administrativa.
Eliminación de impuestos internos
Uno de los cambios más destacados es la supresión de los llamados impuestos internos, que gravaban operaciones financieras como la compra de divisas o ciertos pagos al exterior. La eliminación de estos gravámenes busca desincentivar la informalidad y facilitar la circulación de capitales.
Impacto en consumidores y sectores clave
Según La Nación, la amortiguación de la carga tributaria se reflejará en una caída de precios de alquileres, mayor accesibilidad a la compra de automóviles y condiciones más favorables para los plazos fijos en dólares. Los analistas anticipan que la combinación de mayor poder adquisitivo y menores costos financieros impulsará la demanda interna.
Repercusiones para las empresas
Para el sector empresarial, la reforma implica una reducción de la carga impositiva directa, pero también la obligación de destinar una parte de los ahorros a fondos de capacitación y política salarial, como medida de balance fiscal. El objetivo es que la mayor disponibilidad de recursos se traduzca en inversión productiva y generación de empleo.
Conclusión
La reforma laboral, a través de sus cambios tributarios, pretende crear un entorno más competitivo y equitativo. Al bajar los tributos sobre la renta, el consumo y las operaciones financieras, se espera un impulso al crecimiento económico y una mayor inclusión social.
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