Una organización criminal que se hacía pasar por empresarios logró acceder a créditos millonarios y defraudó a entidades financieras por alrededor de $1,8 billones de pesos. Las fuerzas de seguridad las detuvieron a inicios de diciembre y el DFI de la PFA desmanteló su estructura.
Detención y alcance de la trama
Entre el 10 y el 13 de diciembre de 2025, la Dirección Federal de Investigaciones (DFI) de la PFA arrestó a ocho personas vinculadas a una red que, bajo la apariencia de empresarios, solicitó y obtuvo créditos por un total cercano a los $1,8 billones de pesos. Los detenidos fueron procesados en la sede de la Fiscalía Federal de la Ciudad.
Cómo funcionó la estafa
Los implicados crearon tres empresas ficticias que presentaban estados financieros impecables y avales de alta solvencia. Con esa fachada, lograron que bancos nacionales y privados les concedieran líneas de crédito y préstamos que superaban los $1,6 billones en una sola operación y alcanzaron los $1,8 billones al sumar múltiples créditos y renovaciones.
Una vez obtenidos los fondos, el dinero se desvió a cuentas offshore y a empresas pantalla vinculadas a los integrantes de la banda, dificultando su rastreo. La estafa afectó principalmente a instituciones del sector agropecuario y a constructoras medianas.
Respuesta de las autoridades
El DFI, con apoyo de la Unidad de Delitos Financieros, analizó los movimientos bancarios, interpuso órdenes de secuestro de activos y cooperó con la Comisión Nacional de Valores (CNV) para congelar los recursos. Además, se activó la normativa de prevención de lavado de dinero (Ley N.º 25.246) para rastrear los flujos.
| Concepto | Monto (ARS) |
|---|---|
| Créditos totales solicitados | $1.8 billones |
| Créditos confirmados por bancos | $1.6 billones |
| Detenidos | 8 personas |
| Fecha de detención | 13/12/2025 |
Impacto y lecciones
El caso evidencia la vulnerabilidad del sistema crediticio frente a documentos falsificados y la importancia de reforzar los procesos de due diligence (debida diligencia). Las entidades financieras anunciaron la revisión de sus protocolos de verificación de identidad y origen de fondos.