El presidente Donald Trump designó al teniente general Francis L. Donovan como futuro comandante del Comando Sur de EE. UU., encargado de América Central, del Sur y el Caribe, en medio de una escalada de tensiones con Venezuela. Simultáneamente, la Guardia Costera estadounidense interceptó al petrolero Centuries, de bandera panameña, frente a la costa venezolana, alegando que transportaba crudo sujeto a sanciones.
Nombramiento en el Comando Sur
El 20 de diciembre de 2025 el mandatario estadounidense, Donald Trump, propuso elevar al teniente general Francis L. Donovan al grado de general y nombrarlo jefe del Comando Sur de los Estados Unidos, posición que sucederá al almirante Alvin Holsey, quien anunció su jubilación el 12 de diciembre de 2025. El nuevo nombramiento deberá ser ratificado por el Senado, donde la Comisión de Servicios Armados revisará la designación.
Donovan, actualmente vicejefe del Comando de Operaciones Especiales, es especialista en infantería, reconocimiento y operaciones especiales, con experiencia en despliegues expedicionarios tanto en mar como en tierra. Su ascenso sugiere un posible mayor énfasis del Pentágono en misiones encubiertas en América Latina.
Interceptación del petrolero “Centuries”
En la misma jornada, la Secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, anunció en la red social X que, al amanecer, la Guardia Costera de EE. UU., con apoyo del Departamento de Guerra, interceptó un petrolero que había atracado recientemente en Venezuela. El buque, llamado Centuries, navegaba bajo bandera panameña y, según fuentes, pertenece a una empresa china que transporta crudo venezolano a Asia.
Washington aseguró que el barco transportaba petróleo sujeto a sanciones estadounidenses, aunque el propio New York Times señaló que la embarcación no figura en la lista de buques sancionados por la Casa Blanca. La intercepción constituye la segunda captura en el Caribe en menos de un mes, después del buque Skipper incautado la semana anterior.
Reacciones regionales
La vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, denunció el acto como “robo y secuestro” y anunció que Venezuela llevará el caso ante el Consejo de Seguridad de la ONU y otros organismos multilaterales. Por su parte, el presidente brasileño Lula da Silva advirtió que una intervención armada contra Venezuela sería una “catástrofe humanitaria” y calificó la política estadounidense de “precedente peligroso para el mundo”.
El presidente argentino Javier Milei respaldó la presión de EE. UU. contra el gobierno de Nicolás Maduro, señalando a Venezuela como un “peligro continental”.
Contexto de la escalada
Desde agosto de 2025, Washington intensificó su presencia naval en el Caribe, realizando el mayor despliegue en décadas. El Comando Sur ha registrado 28 ataques contra embarcaciones que, según EE. UU., están vinculadas al narcotráfico, aunque críticos internacionales los califican de ejecuciones extrajudiciales. El último de esos incidentes ocurrió el 2 de septiembre de 2025, cuando dos hombres fueron abatidos tras sobrevivir a una embestida inicial.