Un estudio del Biobanco del Reino Unido, que analizó datos de más de 10.000 personas, detectó que la proteína Brevican se dispara en los cerebros de los adultos a los **60, 70 y 80 años**, indicando momentos en los que el deterioro cognitivo se acelera. Este hallazgo abre nuevas rutas para prevenir enfermedades neurodegenerativas y fomentar un envejecimiento cerebral saludable.
¿Qué es la proteína Brevican?
La Brevican (BCAN) es una proteína estructural del tejido extracelular del sistema nervioso central. Su función principal es mantener la integridad de la matriz perineuronal, que influye en la plasticidad sináptica y la estabilidad de las redes neuronales.
Descubrimiento de los picos de envejecimiento
Investigadores del Biobanco del Reino Unido examinaron muestras cerebrales de más de 10.000 individuos de distintas edades. Encontraron aumentos significativos de Brevican en tres franjas etarias:
- 60 años: inicio de la desaceleración cognitiva en muchos adultos.
- 70 años: intensificación de la pérdida de conectividad sináptica.
- 80 años: período crítico donde se dispara la vulnerabilidad a trastornos como el Alzheimer.
Implicaciones para la salud pública
El patrón no es lineal; se trata de “olas” de mayor vulnerabilidad. Conocer estos momentos permite diseñar intervenciones preventivas específicas, como programas de ejercicio mental y físico, control de factores de riesgo cardiovascular y dietas enriquecidas en omega‑3.
Contexto global
El envejecimiento poblacional es una realidad reconocida por organismos como la Organización Mundial de la Salud (OMS), que impulsa la Década del Envejecimiento Saludable (2021‑2030). En México, el INAPAM destaca la necesidad de adaptar los servicios de salud a las cambiantes demandas de los adultos mayores.
¿Qué podemos hacer?
Los expertos recomiendan:
- Mantener actividad física regular (caminatas, natación).
- Estimular el cerebro con juegos estratégicos, aprendizaje de idiomas o instrumentos.
- Fomentar la vida social para proteger la conectividad neuronal.
- Controlar la presión arterial, glucosa y colesterol.
Si bien no existe una fórmula mágica, estos hábitos pueden amortiguar el impacto de los picos de Brevican y favorecer una vejez cognitiva activa.