El Banco Central de la República Argentina (BCRA) intensificó su intervención en el mercado de futuros del dólar, destinando cerca de USD 2.000 millones en mayo para estabilizar el tipo de cambio. Esta maniobra, que busca respaldar al peso tras la eliminación del cepo cambiario, desató críticas en la City por su impacto en las reservas y la sostenibilidad de la estrategia.
Una intervención histórica para controlar el dólar
En un contexto de alta volatilidad económica, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) llevó a cabo una intervención sin precedentes en el mercado de futuros del dólar durante mayo de 2025. Según datos oficiales, la entidad destinó cerca de USD 2.000 millones de sus reservas para frenar la escalada del tipo de cambio, especialmente en el primer mes tras la eliminación del cepo cambiario, una medida clave del gobierno de Javier Milei para liberalizar la economía.
La estrategia del BCRA apuntó a estabilizar las expectativas del mercado y evitar una devaluación abrupta del peso. Sin embargo, esta decisión generó un fuerte debate en la City porteña, donde analistas y operadores cuestionan la sostenibilidad de usar reservas para intervenir en contratos futuros, en lugar de priorizar la acumulación de divisas para enfrentar compromisos externos.
Contexto de la medida: liberalización y desafíos
Desde la asunción de Javier Milei en diciembre de 2023, el gobierno de La Libertad Avanza ha impulsado una agenda de desregulación económica, eliminando restricciones históricas como el cepo cambiario. Esta apertura, aunque celebrada por sectores promercado, trajo consigo una presión inmediata sobre el tipo de cambio, con un dólar paralelo que mostró tendencia alcista en los primeros meses de 2025. El BCRA, bajo la conducción de su actual gestión, optó por intervenir en el mercado de futuros para enviar una señal de control y evitar una corrida cambiaria.
Según datos de la entidad, en el primer mes sin cepo, la intervención alcanzó los USD 1.500 millones solo en operaciones iniciales, un monto que luego escaló a casi USD 2.000 millones. Este nivel de gasto de reservas no se veía desde hace años y pone en el foco la delicada situación de las arcas del Central, que aún lucha por recomponer su posición neta de divisas tras años de políticas restrictivas y desmanejo.
Críticas y riesgos: ¿una solución sostenible?
En la City, las opiniones son divididas. Algunos operadores consideran que la intervención es una herramienta válida para ganar tiempo y generar confianza en un contexto de transición hacia un mercado más libre. Sin embargo, otros advierten que el uso intensivo de reservas puede ser un arma de doble filo, especialmente si la entrada de dólares por exportaciones o inversiones no acompaña el ritmo de salida. ‘Quemar reservas para sostener el tipo de cambio no es una estrategia de largo plazo’, señaló un analista financiero consultado por medios especializados.
Además, el costo de estas operaciones en futuros implica compromisos a meses vista, lo que podría limitar la capacidad de maniobra del BCRA ante shocks externos, como una caída en los precios de las materias primas o una suba de tasas en Estados Unidos. En este sentido, el desafío para el gobierno de Milei será atraer capitales y fomentar la competitividad exportadora para equilibrar la balanza cambiaria sin depender exclusivamente de las reservas.
Datos clave de la intervención
Concepto | Monto | Período |
---|---|---|
Intervención inicial en futuros | USD 1.500 millones | Primeras semanas de mayo 2025 |
Intervención total estimada | USD 2.000 millones | Mayo 2025 |
¿Qué sigue para el dólar y las reservas?
El futuro de esta estrategia dependerá de la capacidad del gobierno para consolidar un entorno favorable a la inversión y la entrada de divisas. Mientras tanto, el mercado sigue de cerca las señales del BCRA y las decisiones de política económica que podrían definir si esta intervención fue un acierto táctico o un paso en falso. En un país donde el dólar es un termómetro de la confianza, cada movimiento del Central es observado con lupa.