El canciller de Israel anuncio su deseo de sentarse con el presidente argentino Javier Milei en Nueva York para hablar comercio y seguridad. La inestabilidad política del país, con protestas masivas que comenzaron el 23 de agosto y aumentaron el 28 de agosto, junto a temores de seguridad, ha complicado la posible visita. Ambas autoridades expresan dudas sobre su cumplimiento.
Benjamin Netanyahu, representante de Israel, publicó su intención de reunirse con el presidente argentino Javier Milei a nivel internacional en Nueva York. El objetivo seria fortalecer la relación comercial y coordinar estrategias de seguridad. Milei manifestó apertura a ese encuentro, pero subrayó que la situación interna de Argentina sigue siendo tensa. Desde el 23 de agosto las manifestaciones en Rosario y en otras ciudades del país se intensificaron, clamando rechazo y denunciando la falta de avances en políticas internas. La fecha de 28 de agosto registró protestas masivas en Tel Aviv, Jerusalén y Haifa, lo que generó alertas de seguridad adicionales en el país. Los funcionarios de ambos gobiernos alertaron sobre un posible riesgo de movilizaciones masivas y violencia en caso de la llegada de Netanyahu. La alerta naranja del 19 de agosto, con fuertes lluvias en Buenos Aires y en otras provincias, añadió incertidumbre al calendario de viajes. Por ello, la seguridad de la delegación israelí y del público argentino son factores decisivos que impiden fijar la visita. Las autoridades de Argentina están reforzando los protocolos de seguridad para dignatarios extranjeros, lo que aumenta la complejidad logística de la reunión. Hasta el momento, el Gobierno de Israel no ha aprobado oficialmente la expedición y permanece en duda su realización.