La Comisión Europea ha dado paso al proceso de ratificación del acuerdo comercial con el bloque sudamericano Mercosur, una iniciativa que busca reforzar el intercambio de bienes y servicios, abrir nuevas oportunidades para la industria, y abordar desafíos de sostenibilidad y normativas laborales. Con su aprobación, se espera que la negociación entre las instituciones europeas y los países miembros del Mercosur acelere.
Antecedentes
El acuerdo comercial entre la Unión Europea y los miembros del Mercosur, que incluye a Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, fue firmado en 2019 con el objetivo de eliminar barreras arancelarias y fortalecer la cooperación económica. Cubre más de 2.000 líneas de producto y contempla una reducción de aranceles progresiva durante una década de transición.
Importancia del Acuerdo
El comercio bilateral entre la UE y el Mercosur suma alrededor de 80 millones de euros al año. La eliminación de aranceles se prevé que aumente la competitividad de los exportadores europeos en el mercado sudamericano y fomente el desarrollo de nuevas exportaciones de productos agrícolas y manufacturados.
Proceso de ratificación
La Comisión Europea aprobó el acuerdo el 29 de agosto de 2024, lo que dio inicio a la etapa legislativa que incluye la ratificación por parte del Parlamento Europeo. Se prevé que la votación definitiva se celebre en el segundo trimestre de 2025, con la expectativa de que el acuerdo entre en vigor al final de ese mismo año.
Reacciones y desafíos
Si bien el tratado representa una gran oportunidad comercial, también ha generado debates sobre el impacto ambiental, especialmente la deforestación en la Amazonía, y sobre el cumplimiento de estándares laborales y de protección de los derechos humanos en los países firmantes.
Perspectivas futuras
Con la ratificación, la UE y el Mercosur podrán fortalecer la colaboración en áreas como la innovación, la industria 4.0 y los servicios digitales, ampliando así la integración de las economías de ambos bloques.