Ir al contenido
Portada » Redford y Newman: química, Porsche y un insulto inolvidable

Redford y Newman: química, Porsche y un insulto inolvidable

El fallecimiento de Robert A. Redford, icónico actor y fundador del Sundance Film Festival, ha puesto en relieve la inolvidable química que compartió con Paul Newman en la cinta clásica El golpe. La escena de los dos con sus lujosos Porsche y el pequeño insulto que marcaron sus relaciones en Hollywood sigue siendo recordada con nostalgia y chispa.

Robert A. Redford, nacido 18 de agosto de 1936, falleció el 16 de septiembre de 2025 a los 89 años. Fue actor de Hollywood, director y activista ambiental. Es el fundador del Sundance Film Festival, creado en 1978, que se ha convertido en la plataforma de lanzamiento de cine independiente.

Entre sus papeles más reconocidos está el de Johnny Hooker en El golpe (1973), dirigida por George Roy Hill. La película ganó el Oscar a Mejor Película y al Mejor Guion Adaptado. El filme se desarrolla en la década de 1930 y narra la historia de dos estafadores que planifican un gran fraude contra la mafia.

Durante la realización contó con la participación de Paul Newman, quien interpretó a William “Moe” Greene. Los dos actores desarrollaron una química que se reflejó tanto en la pantalla como en el set. Según testimonios de la época, en una escena de alto riesgo ambos condujeron un Porsche 911, el cual servía como vehículo de escape de los estafadores.

El episodio fue recordado no solo por el carisma de los protagonistas, sino por la forma en que Newman le hizo un comentario ingenioso a Redford: Eres un chiste, Redford, provocando risas entre el personal de filmación. El breve intercambio se convertiría en una anécdota que los críticos citarían para describir la relación profesional entre los dos maestros del cine.

La muerte de Redford provocó tributos de toda la industria del entretenimiento, recordando su legado como actor y como un defensor incansable del medio ambiente. El golpe sigue siendo uno de los clásicos que se muestra en festivales de cine y en salas de exhibición, y la presencia de los Porsche 911 aparece como símbolo de la elegancia de la época. Se mantiene como recordatorio del talento humano que marcó la década de los 70.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *