En plena fase de reconstrucción tras el alto el fuego, cientos de camiones de la ONU y organizaciones internacionales han entrado a Gaza, trayendo millones de cajas de alimentos, medicinas y materiales de construcción. Simultáneamente, la comunidad internacional alimenta la esperanza de que los rehenes secuestrados durante el conflicto sean liberados.
Un mar de camiones cruza los accesos a Gaza
La madrugada del 12 de octubre de 2025, se abrió el paso para la primera gran ola de camiones de ayuda en los puertos y terminales de Gaza, tras la firma del alto el fuego entre Israel y Hamas. Aproximadamente 300 vehículos de la ONU, la Cruz Roja, la Agencia Internacional de Rescate y otras ONG formaron un convoy que atravesó el estrecho de Rafah bajo estrictas normas de seguridad.
Estos camiones transportan una mezcla de almuerzos preparados, medicinas para enfermedades crónicas, kits de primeros auxilios y material de reconstrucción básico. La entrega de ayuda se ha planeado en rotaciones diarias para asegurar un flujo continuo durante la recuperación.
Logística y coordinación internacional
El Fondo de Ayuda Humanitaria de las Naciones Unidas ha coordinado la operación y ha señalado que el objetivo es alcanzar más de 1 millón de personas en Gaza en el primer trimestre. Las autoridades de Israel han delegado el control del tránsito en la agencia UNRWA para garantizar la entrega sin interrupciones.
La esperanza de liberación de los rehenes
Mientras los camiones desembarcan, la comunidad internacional mantiene viva la expectativa de liberar a los sobre 130 rehenes israelíes y palestinos que fueron capturados en la ofensiva de junio de 2024. Organismos humanitarios y gobiernos aliados están impulsando negociaciones a través del canal diplomático de la ONU.
Según declaraciones de la presidenta de la Comisión de Medios de la ONU, la liberación de los rehenes se consideró un elemento clave para garantizar la continuación de la ayuda y la estabilización de la zona.
Con la ayuda en marcha y la esperanza de paz, la región avanza, aunque el trabajo de reconstrucción sigue siendo largo y desafiante.