Lionel Messi, recién fichado por Inter Miami, protagonizó un encuentro poco ordenado con la selección argentina, donde la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) también tuvo participación oficial. El partido, jugado en el estadio de Inter Miami, mostró a ambos equipos luchando por la posesión y la eficiencia, generando una atmósfera de tensión y expectativa entre aficionados y analistas deportivos
Lionel Messi, quien firmó contrato con Inter Miami en enero de 2025, llegó al club con la expectativa de aportar su experiencia al lado de varios jugadores jóvenes del equipo. El club de la MLS, por su parte, mostró su ambición de posicionarse como uno de los equipos estadounidenses más competitivos.
En el contexto de una visita especial a la zona, la Selección Argentina, junto con la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), organizó un amistoso ante Inter Miami. El encuentro se jugó en el estadio de Inter Miami el pasado domingo, con ambos equipos comprometidos en evaluar la táctica y la condición física de sus jugadores.
El partido se caracterizó por un ritmo frenético y una notable falta de control en la posesión por parte de ambos bándos. Los organizadores y la AFA informaron que el objetivo principal era probar la disposición de los jugadores ante situaciones de presión y la calidad de su juego en condiciones de transición.
A pesar de la falta de organización aparente, la partida generó gran expectación tanto en las redes sociales como en la prensa local. Los comentarios de los comentaristas reflejaron una mezcla de críticas y elogios: por un lado se señaló la necesidad de mejorar en la gestión del balón, y por otro, el entusiasmo generado por la presencia de una estrella internacional como Messi.
Con la mirada puesta en los próximos compromisos, tanto Inter Miami como la Selección Argentina planean ajustar sus tácticas. De acuerdo con declaraciones públicas de representantes de ambas entidades, se continuará la colaboración en torneos de preparaciones y competiciones amistosas para el futuro cercano.
El encuentro, aunque descrito como «desprolijo», se considera un paso importante hacia la consolidación de la relación entre la AFA, la Selección Argentina y el club interamericano, además de servir como espectáculo atractivo para los aficionados del fútbol latinoamericano y mundial.