Meta ha tomado una medida sin precedentes: WhatsApp Business restringe el acceso a su API para todos los chatbots generalistas, incluyendo ChatGPT, Luzia y Perplexity. La compañía indica que solo permitirá un único chatbot oficial, generando incertidumbre en pymes y desarrolladores que dependían de la automatización de conversaciones.
¿Qué ocurrió?
Meta anunció que a partir de este mes WhatsApp Business prohibirá el acceso a cualquier chatbot generalista mediante su API. La restricción afecta a los modelos más populares del mercado, como ChatGPT de OpenAI, Luzia y Perplexity AI, entre otros.
Motivación oficial
Según la empresa, la medida busca garantizar la seguridad, privacidad y calidad de la experiencia del usuario. Meta afirma que la proliferación de agentes automáticos no controlados ha generado problemas de spam, desinformación y vulneraciones de datos en la plataforma.
¿Qué chatbots seguirán operando?
En el comunicado, Meta indicó que solo se mantendrá activo un único chatbot oficial, desarrollado internamente o bajo una estricta revisión. No se reveló el nombre del agente permitido, aunque se especula que será una solución propia de Meta.
Impacto en empresas y desarrolladores
La decisión afecta a cientos de pequeñas y medianas empresas que utilizaban chatbots para atención al cliente, reservas o procesos de venta. Expertos advierten que la prohibición podría reducir la eficiencia operativa y obligar a migrar a otras plataformas de mensajería o a desarrollar soluciones propias bajo el nuevo marco de Meta.
Reacciones del sector
La comunidad tecnológica ha expresado preocupación. En foros de desarrolladores, muchos señalan que la medida limita la innovación y favorece el monopolio de Meta sobre la IA conversacional dentro de su ecosistema. Por otro lado, algunos analistas ven la medida como una oportunidad para que otras apps de mensajería, como Telegram o Signal, ganen cuota de mercado entre quienes buscan soluciones de chatbot abiertas.
Perspectivas a futuro
Meta aclara que evaluará casos excepcionales y que la política podrá revisarse según la evolución de la normativa global sobre IA. Mientras tanto, empresas y usuarios deberán buscar alternativas o adaptar sus flujos de trabajo a la nueva realidad de WhatsApp Business.