En una sorprendente victoria que marca un giro histórico, la política de larga trayectoria Catherine Connolly ha sido elegida presidenta de Irlanda con una abrumadora mayoría, consolidando el impulso de la izquierda en la arena institucional del país.
Resultado electoral
En las recientes elecciones presidenciales irlandesas, Catherine Connolly, líder del movimiento progresista y veterana de la izquierda, obtuvo una clara mayoría de votos, superando con amplio margen a sus principales rivales. Los resultados oficiales, publicados por la Comisión Electoral, reflejan una preferencia mayoritaria por su programa de justicia social, sostenibilidad y reforma institucional.
Perfil de la nueva mandataria
Catherine Connolly, de 61 años, cuenta con más de 35 años de experiencia en la política irlandesa, desempeñándose como diputada, ministra de Salud y activista de derechos humanos. Su trayectoria está marcada por la defensa del Estado de bienestar, la lucha contra la desigualdad y la promoción de energías renovables.
Contexto político y social
El triunfo de Connolly se produce en un momento de creciente polarización en Irlanda, donde el debate sobre la vivienda, los costes de vida y la transición climática ha dominado la agenda pública. La victoria de la izquierda sugiere un demandante deseo de cambios estructurales y una mayor participación ciudadana en la toma de decisiones.
Reacciones nacionales e internacionales
Partidos centristas y conservadores han reconocido el resultado y llamado a la unidad institucional. Figuras internacionales, incluidos representantes de la Unión Europea, felicitaron a Connolly, subrayando la importancia de una Irlanda comprometida con los valores democráticos y el progreso social.
Incidente contra simpatizantes
En los días posteriores al anuncio, se registró una agresión contra dos simpatizantes de la candidata en Dublín, según informó Infobae. Las autoridades han abierto una investigación y han condenado enérgicamente cualquier acto de violencia política.
Próximos pasos
Connolly tomará posesión del cargo el 12 de noviembre de 2025, fecha establecida por la Constitución irlandesa para la investidura presidencial. En su primer discurso, se espera que destaque la necesidad de cohesión social, la lucha contra el cambio climático y la modernización de las instituciones.