Una serie de Netflix revive el escalofriante caso del ‘Monstruo de Florencia’, el asesino que entre 1968 y 1985 acabó con 16 personas en la Toscana. La producción combina testimonios, archivos inéditos y recreaciones para adentrarse en uno de los crímenes sin resolver más famosos de Italia.
Contexto histórico del caso
Entre 1968 y 1985, un desconocido atacó a ocho parejas jóvenes en lugares aislados de la campiña toscana, dejando un total de 16 víctimas. Las muertes fueron brutalmente violentas y el modus operandi, que incluía heridas de cuchillo y disparos, generó una ola de terror que sacudió a Italia durante casi dos décadas.
Investigaciones y sospechas
Las autoridades locales y el Carabiniere se vieron superados por la falta de pruebas concluyentes. A lo largo de los años se barajaron varios sospechosos, entre ellos Francesco Giacomo Martelli y el médico Mario Vanni, pero ninguno fue condenado. El caso quedó abierto y sigue alimentando teorías de conspiración y documentales.
La serie de Netflix
En 2024 Netflix lanzó la miniserie documental El monstruo de Florencia, compuesta por cuatro episodios de aproximadamente 45 minutos cada uno. La producción combina archivos policiales, entrevistas con sobrevivientes, familiares y expertos forenses, y recreaciones dramatizadas que permiten al espectador vivir la atmósfera de miedo y la incertidumbre que envolvía a la población.
Impacto y recepción
Desde su estreno, la serie se posicionó entre los contenidos más vistos de la plataforma en Italia y ha despertado un renovado interés internacional por el caso. Críticos elogian la investigación periodística rigurosa y la sensibilidad en la narración, mientras que algunos familiares de las víctimas han expresado preocupación por la re‑exposición del dolor.
¿Qué queda por descubrir?
Aunque la serie no aporta nuevas pruebas decisivas, sí reúne testimonios que podrían abrir nuevas líneas de investigación. El archivo judicial permanece abierto y, tras más de 40 años, la esperanza de identificar al responsable sigue viva entre los investigadores y la sociedad italiana.