El gobernador de Santiago del Estero, Osvaldo Jaldo, anunció su disposición a acompañar la polémica reforma laboral impulsada por el presidente Javier Milei, instando a los sectores peronistas a organizar su fuerza para enfrentar el proyecto y buscar consensos en medio de la creciente tensión política y económica del país.
Jaldo se suma al debate sobre la reforma laboral
En una rueda de prensa celebrada en la capital santiagueña, el gobernador Osvaldo Jaldo declaró su apoyo a la reforma laboral propuesta por el presidente Javier Milei. Jaldo subrayó que la medida busca “flexibilizar los contratos, reducir la carga impositiva para las empresas y facilitar la generación de empleo“, conceptos centrales del plan de liberalización económica que el Ejecutivo está impulsando.
Contexto de la reforma
La reforma laboral de Milei propone cambios como la eliminación de la indemnización por despido sin causa, la reducción de la carga de aportes patronales y la simplificación de los convenios colectivos. Los defensores argumentan que estas modificaciones permitirían mayor competitividad y atraerían inversión extranjera; los críticos advierten un debilitamiento de las garantías de los trabajadores.
Reacción del peronismo
Jaldo, histórico dirigente peronista, señaló que su postura no contradice los principios del movimiento, sino que busca “organizar la fuerza peronista para enfrentar el desafío y participar constructivamente“. Añadió que la decisión se tomó tras consultas con liderazgos locales y la comunidad empresarial.
El anuncio se produce en medio de una serie de declaraciones de otros gobernadores peronistas que también expresan su predisposición a acompañar la reforma, aunque con reservas y proponiendo ajustes para proteger a los trabajadores.
Impacto político y económico
El respaldo de un gobernador importante como Jaldo representa un giro notable en la dinámica política, ya que abre la posibilidad de una mayor negociación entre el Ejecutivo y los gobiernos provinciales. Economistas señalan que, de concretarse la reforma, se podrían generar entre 200.000 y 300.000 nuevos empleos en los próximos dos años, aunque los efectos reales dependerán de la respuesta del mercado y de la implementación de medidas complementarias.
Por su parte, los sindicatos anunciaron movilizaciones para denunciar lo que califican como una “amenaza a los derechos laborales” y reiteraron su disposición a dialogar en busca de garantías.
Próximos pasos
El Congreso deberá debatir y votar el proyecto en los próximos meses. Jaldo indicó que su gobierno estará atento a los avances y dispuesto a aportar propuestas que equilibran crecimiento y protección social.