Un incendio de enorme magnitud consumió un edificio de gran altura en Hong Kong a principios de noviembre, cobrándose 128 vidas y dejando cientos de heridos. Las autoridades ya detuvieron a 11 personas mientras investigan las causas que hicieron de esta catástrofe una de las más letales en la historia reciente de la ciudad.
Fatal desenlace de un siniestro sin precedentes
En la madrugada de noviembre de 2025, un incendio se desató en un rascacielos del distrito de Kowloon, Hong Kong, propagándose a una velocidad alarmante. El fuego, que alcanzó rápidamente varios pisos, dejó 128 muertos, según el Departamento de Bomberos de Hong Kong, y cientos de personas evacuadas en condiciones críticas.
Factores que agravan la tragedia
Testimonios de sobrevivientes revelan que no sonó ninguna alarma en los momentos críticos, lo que impidió una evacuación ordenada. La falta de sistemas de detección automática y la deficiente señalización de salidas de emergencia son algunos de los puntos que las investigaciones preliminares ya señalan como posibles causas.
Operativo de rescate y detenciones
Las brigadas de bomberos trabajaron durante más de 24 horas para controlar las llamas y rescatar a los atrapados. El operativo concluyó oficialmente el 27 de noviembre de 2025, aunque los trabajos de investigación continúan.
Hasta la fecha, 11 personas han sido detenidas bajo sospecha de negligencia grave, violación de normas de seguridad e improbable sabotaje. Las autoridades han declarado que se examinará detalladamente la responsabilidad de los propietarios del edificio, la empresa constructora y los encargados del mantenimiento de los sistemas de seguridad.
Repercusiones y medidas futuras
El gobierno de Hong Kong ha anunciado una revisión exhaustiva de la normativa de prevención de incendios en edificios de gran altura, con la promesa de reforzar los sistemas de detección y evacuación. Además, se espera la implementación de inspecciones más rigurosas y sanciones más severas para incumplimientos.
El dolor de la comunidad
Familias de las víctimas y vecinos del área han organizado vigilias y homenajes para honrar a los fallecidos. El presidente de Hong Kong expresó su profundo pesar y se comprometió a apoyar a los afectados con recursos de salud mental y ayudas económicas.