El Gobierno argentino, a través del Banco Central, empleó sus reservas internacionales para cubrir hoy una deuda de US$ 1.000 millones con importadores. La medida, anunciada para el 1 de diciembre de 2025, busca aliviar tensiones cambiarias y demostrar la solvencia del Estado frente al sector externo.
Contexto y antecedentes
Desde inicios de 2025, la balanza comercial de Argentina ha registrado déficits que incrementaron la necesidad de financiar importaciones esenciales. El Banco Central (BCRA) mantiene un stock de reservas internacionales que sirve como respaldo ante pagos externos y estabilización del tipo de cambio.
Detalle del pago de mil millones de dólares
El 1 de diciembre de 2025, el Gobierno autorizó el desembolso de US$ 1.000 millones a través de reservas para cancelar deudas pendientes con importadores locales. La operación se realizó mediante transferencias bancarias coordinadas por el BCRA, utilizando parte de sus reservas en dólares.
Impacto económico y financiero
Esta medida reduce la presión sobre el mercado cambiario al evitar una mayor depreciación del peso. Además, al liquidar una deuda significativa, se busca restaurar la confianza de los proveedores extranjeros y evitar posibles restricciones de suministro.
Reacciones y perspectivas
Analistas del FMI y del sector financiero local han señalado que, aunque la operación alivia la tensión inmediata, la sostenibilidad de la política dependerá de la evolución de las reservas y de la capacidad del gobierno para equilibrar su balanza comercial. El BCRA también anunció la cancelación de un vencimiento de BOPREAL por el mismo monto, reforzando la coordinación entre política fiscal y monetaria.
¿Qué sigue?
Se espera que el Gobierno evalúe nuevas estrategias para mantener la estabilidad cambiaria, incluyendo posibles acuerdos de financiamiento a mediano plazo y medidas para incentivar exportaciones. La situación de reservas será monitoreada de cerca por inversores locales e internacionales.